Critica EU que autoridades de Egipto prohíban a varios estadunidenses dejar el país norafricano
En Alejandría, segunda mayor ciudad, un centenar de personas levantan casas de campaña con igual objetivo
Viernes 27 de enero de 2012, p. 28
El Cairo, 26 de enero. Miles de jóvenes que acamparon desde el pasado miércoles en la plaza Tahrir de la capital egipcia afirmaron hoy que no se moverán de ahí hasta que las fuerzas armadas entreguen el poder a los civiles, un día después de que una manifestación masiva celebró el primer aniversario de la revuelta popular que derrocó al presidente Hosni Mubarak.
Al caer la noche este jueves, la gran plancha del centro de El Cairo se llenó de carpas, donde pernoctan los manifestantes, que están dispuestos a dar un nuevo impulso al movimiento popular por la democratización del Estado egipcio.
En Alejandría, la segunda mayor ciudad de Egipto, un centenar de jóvenes manifestantes también levantó casas de campaña en una plaza céntrica, con el mismo objetivo democratizador.
No percibo ningún cambio. El consejo militar está liderando una contrarrevolución. Vamos a protestar hasta que se vayan
, dijo en la capital egipcia el estudiante Samer Qabil, de 23 años.
El consejo de las fuerzas armadas tomó el mando del país árabe cuando Mubarak fue derrocado, organismo que es dirigido por el mariscal Mohamed Hussein Tantaui, quien fue ministro de Defensa del ex mandatario durante dos décadas y asegura que entregará el poder a los civiles tras una elección presidencial en junio.
La represión militar también se ha extendido a las organizaciones no gubernamentales. La acción más violenta ocurrió en diciembre pasado, cuando los locales de 17 asociaciones civiles fueron allanados por uniformados.
Este jueves, desde Washington, el subsecretario de Estado estadunidense, Michael Posner, criticó que las autoridades egipcias prohibieron a varios ciudadanos de su país salir del país norafricano.
Entre ellos hay miembros del Instituto Republicano Internacional (un brazo del conservador Partido Republicano estadunidense), que recibe fondos del gobierno de Estados Unidos para sus actividades en el extranjero.
Mientras tanto, se reanudaron hoy los juicios contra Mubarak, sus dos hijos, el ex ministro del Interior Habib Adli y seis colaboradores de este último.
Durante la audiencia, un abogado de la defensa acusó a los guardias de seguridad de la Universidad Americana de El Cairo de asesinar a manifestantes hace un año en Tahrir, un hecho que provocó una ola de repudio popular que llevó a la caída de Mubarak.
En la sala del juicio estuvo presente el ex mandatario, acusado de haber ordenado la represión que causó cientos de muertes.
Una de las demandas de los manifestantes acampados ahora en la plaza Tahrir es que las autoridades judiciales no retarden los juicios y las sentencias.