Sin informar a la sociedad, en campañas de difusión, de los riesgos a la salud que implica usar productos milagro, será poco efectivo intentarlo sólo con una regulación publicitaria, alertaron expertos en mercadotécnia y medios de comunicación de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).

Aseguraron que en promedio se anuncian 100 de esos productos en televisión y en otros medios de difusión que exponen al potencial consumidor a una enorme cantidad de mensajes, a lo que se suman medios masivos de comunicación que no ayudan a desmontar el pensamiento mágico-religioso que te permite creer que usar una crema o beber un extracto de plantas pueden curar diabetes, hipertensión, cansancio crónico u obesidad, entre muchos otros padecimientos.

Es una lista enorme de mercancías, algunas salen de las pautas publicitarias al ser detectadas como fraude, pero son sustituidas por otras con nombre y marca distinta. Salen unas y entran otras, afirmó Rebeca Pérez Calderón, experta en mercadotecnia de esa casa de estudios.

Luego que el presidente Felipe Calderón promulgó el decreto de refoma de la Ley General de Salud en materia de publicidad, que obliga a medios de difusión asegurar que las mercancias curativas que anuncian cuentan con el permiso de autoridades sanitarias, agregó que “no basta con impedir que se difundan esos comerciales. Se deben garantizar los derechos del consumidor, entre ellos el de estar informado sobre lo que va a adquirir”.

Pérez Calderón enfatizó que las estratégias mercadológicas de productos milagro incluyen infomerciales hasta de media hora de duración en los que se repite más de 20 veces el nombre y marca del producto, lo que genera un impacto en el posible consumidor.

Investigaciones de mercado, explicó, han demostrado que cuando se ha estado expuesto más de siete veces a un comercial, se tiende a recordar la marca y generar una expectativa de compra del producto, pero qué pasa cuando lo oímos más de 20 veces: podemos acabar soñando que usamos ese producto y es más fácil engancharnos.

Javier Esteinou Madrid, especialista en medios de comunicación, aseguró que la decisión asumida por Calderón es “importante, pero llega con mucho retraso, pues durante 15 años se toleró un vacío en la regulación de la publicidad de esos productos, lo que ocasionó el fortalecimiento de una creencia para alcanzar de manera mágica la cura de padecimientos”.

Consideró que las secretarias de Salud y Educación Pública deben promover campañas informativas para sensibilizar a la sociedad sobre cómo debe enfrentar los problemas de salud y evitar que, como consumidores, queden expuestos a posibles fraudes de empresas de productos milagro que sólo buscan obtener ganancias.

Advirtió que los medios masivos de comunicación también deben asumir un compromiso ético y no sólo comercial con televidentes y radioescuchas, al no publicitar tales mercancías.