El abanderado del PRI a la Presidencia de la República, Enrique Peña Nieto, desdeñó la propuesta de Andrés Manuel López Obrador de cambiar promocionales de radio y televisión por la realización de debates. Dijo que está interesado y deseoso de debatir, pero con apego a la legislación electoral, porque no es válido que ya iniciada la contienda por la sucesión se pretenda cambiar reglas y normas.

Agregó que sólo irá a ese ejercicio con sus iguales, no con quienes buscan la candidatura.

Insistió: no me parece propio que quienes debiéramos estar en respeto a ese marco legal querer, a juego iniciado, hacer cambio de reglas y hacerlas a modo, y pidió ser respetuosos de la legalidad.

Voy a debatir con quienes sean candidatos de los demás partidos y no con quienes aspiran, pretenden o estén buscando (serlo). Y aquellos que no logren su propósito, pues se quedarán con las ganas de, eventualmente, tener este debate, aseveró.

Peña Nieto ofreció una conferencia de prensa con el presidente del PRI, Pedro Joaquín Coldwell, que dio inicio con retraso y donde, además de anunciar la conformación del nuevo Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del tricolor, ambos censuraron la renuncia de la senadora por Chiapas, María Elena Orantes, en protesta, según su argumento, por la cesión al PVEM de la candidatura al gobierno de esa entidad.

Sus razones, indicaron, carecen de validez, porque aún no se ha iniciado el proceso de selección en Chiapas; pero además ella denuncia un acuerdo cupular en el tricolor para acogerse a otro que ya tiene con López Obrador para ser candidata; ésa sí es una decisión cupular, dijo el dirigente priísta.

Los partidos, abundó, son organizaciones de militancia voluntaria y el PRI tiene las puertas abiertas para que los que quieran irse se vayan y también para recibir a quienes creen en nuestra declaración de principios y en nuestro programa de acción.

Calificó de desmesurado hablar, por decisiones de ese tipo, de la existencia de crisis en el PRI, sobre todo por la cuantía de militantes que buscan una candidatura. Si el PRD en el Distrito Federal está sufriendo, padeciendo este tipo de inconformidades, es natural que las tenga el PRI, que tiene muchos más militantes y cuadros políticos, pues además otros partidos, cuando necesitan cuadros, que es muy frecuente, vienen a buscarlos al PRI, señaló.

Por otra parte, Peña Nieto declinó opinar sobre los problemas legales de orden familiar del ex gobernador del estado de México Arturo Montiel.

Interrogado sobre el volumen de gastos que ha realizados durante el periodo de precampaña, aseguró que éstos han corrido a cargo de las estructuras locales en actos con la militancia, a los cuales él ha asistido como invitado.

Aclaró que de los actos realizados directamente por él, anunciará en su momento el monto a los organismos electorales.

Insistió en su exigencia al gobierno federal de que otorgue atención especial a los pueblos indígenas que se encuentran en condiciones de extrema pobreza, particularmente a los que padecen los efectos de la sequía.

Reiteró su adhesión a la determinación del Congreso de crear un fondo de 10 mil millones de pesos para atender este problema, que si bien no tenía un soporte era una excitativa al Ejecutivo para proceder por esa vía.

El gobierno aún está en falta, aseguró Peña Nieto, pues así lo ha percibido él en sus recientes giras. Por la tarde, la oficina de prensa del mexiquense informó que por cuestiones de agenda de trabajo se reprogramó la visita que realizaría este jueves a Culiacán, Sinaloa.

El priísmo sinaloense ha sido de los principales y más férreos oponentes a los términos de la coalición pactada por el PRI con el Panal y el PVEM, situación que aún no se ha resuelto.

Se informó que la visita se cambió para el 29 de enero.

Ayer se supo que un negocio propiedad del gobernador Mario López Valdez fue atacado por la delincuencia.