Contrastar un museo especializado en arte contemporáneo con uno dedicado al arte clásico no admite división en cuanto a tiempos y técnicas, considera Benjamín Torres.

De allí que el artista, por conducto de la galería Hilario Galguera, propuso trabajar con el archivo de catálogos editado por un recinto museístico, iniciativa que fue acogida por el Museo Nacional de San Carlos.

El resultado es Diagramática, exposición de medio centenar de obras, entre creaciones de Benjamín Torres (Distrito Federal, 1969), del acervo del recinto y de colecciones particulares.

El montaje, a cargo de Hilario Galguera, está concebido como un gabinete decimonónico que concuerda con la línea del museo, cuya colección abarca hasta el siglo XIX.

Benjamín Torres, quien trabaja con base en el collage, manifiesta que muchos museos de arte clásico, como el Metropolitan, el Louvre y el Palacio de Versalles, incorporan ya la obra de artistas contemporáneos.

Eso a Torres le interesa, porque al hacer una relectura de la obra clásica nos damos cuenta de que no está muerta como dicen, sino que la reinterpretación también se actualiza y se vuelve contemporánea, sin importar la época.

De los alrededor de 20 catálogos que se le facilitaron, el artista seleccionó siete u ocho. Y como de la vista nace el amor, ver las obras en impresos despertó su curiosidad por conocer en vivo dichas piezas del acervo del Museo Nacional de San Carlos para integrarlas a la muestra o intervenirlas al hacer reproducciones de sus cuadros en tamaño real. Se han incorporado obras de Rubens, de Anton van Dyck, de Andrea Vaccaro, de Durero, de Pelegrín Clavé y de Lucas Cranach.

También se integran piezas de colecciones privadas, como el dibujo de un desnudo, elaborado por Manuel Rodríguez Lozano, así como obras de Francisco Toledo, Damien Hirst, David Bailey, Neo Rausch y Sante D’Orazio.

A partir de lo visto, me vinieron a la mente piezas de otros artistas contemporáneos, no sólo mías, indica el entrevistado.

Además de trabajar con collages, Torres también hace reproducciones de algunas imágenes, las cuales amplía o reduce.

Afirma que casi siempre realiza las intervenciones con medios manuales, collage o decollage: También hago mucho ese proceso al revés, ya que en vez de agregar quito alguna parte de la imagen.

Torres no trabaja con una idea preconcebida, sino que encuentra imágenes que me son sugerentes, cuyo contenido me indica algún tipo de transformación.

En Diagramática se manejan temas como el deseo, que el artista considera el leit motiv de su producción, “que vemos desde las imágenes publicitarias hasta las que encontré en el Museo Nacional de San Carlos, que me despiertan algo que me incita a hacer estas intervenciones.

Cuando empecé a intervenir los catálogos comenzaron a surgir varios motivos, por ejemplo, la idea de los líquidos como elemento de cambio, de mutación. Igualmente la de la figura humana y el desnudo, que eran una constante en los catálogos, así como de la historia del arte.

El título de la muestra se refiere a un sistema de imágenes que es arbóreo, como red, que adquiere sentido cuando se empiezan a relacionar las partes entre sí, y a partir de los contenidos individuales, se adquiere uno total.

Por otra parte, Benjamín Torres adelanta que montará una exposición individual en la galería Hilario Galguera.

Diagramática concluye el 17 de enero en el recinto de Puente de Alvarado 50, colonia Tabacalera.