Viernes 13 de enero de 2012, p. 2
Milán, 12 de enero. Los precios mundiales de los alimentos continuarían en caída en 2012 debido a que los temores a una recesión debilitan la demanda y los suministros permanecen en niveles adecuados, aseguró el jueves Abdolreza Abbassian, economista destacado de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Sin embargo –señaló–, podrían repuntar si el clima perjudica las cosechas de algunos de los principales productores y se recupera la demanda.
Los precios alimentarios altos impulsaron la inflación e incentivaron el malestar de la primavera árabe a principios del año pasado, lo cual llamó la atención de los líderes del mundo.
No obstante –dijo–, dichas cotizaciones cayeron en forma continua en la segunda mitad de 2011, lo que ayudó a mitigar las presiones inflacionarias.
Indudable tendencia bajista
La FAO informó que su índice de precios alimentarios globales retrocedió en diciembre frente al mes anterior, lo que se suma a las caídas previas en los últimos meses.
Es indudable que hay una tendencia bajista, amplificada porque del lado de la demanda la situación no es muy favorable y los suministros son bastante adecuados (...) para casi todas las materias primas
, aseguró Abdolreza Abbassian.
El mes pasado la FAO, con sede en Roma, elevó su estimación de existencias mundiales de cereales –indicador del suministro global seguido muy de cerca– a 511 millones de toneladas al final de la campaña de 2012, lo que significa un aumento de 5 millones de toneladas frente a su previsión anterior.
Los únicos riesgos alcistas de precios que podríamos ver en los próximos meses y semanas vendrán si la evolución del clima realmente comienza a tener implicaciones para la producción de 2012
, sostuvo Abbassian.
La demanda, si repunta con mayor celeridad en este año, también es una posibilidad que no podemos ignorar
, agregó.
La sequía en Argentina ha impulsado al alza los precios estadunidenses del maíz y la soya en las últimas semanas, pero Abbassian aseveró que aún es temprano para decir si el clima adverso tendría impacto negativo sobre las cosechas en Sudamérica y algunos otros productores importantes.
Los precios mundiales de los alimentos cayeron en diciembre respecto del mes anterior, con fuertes declives en los valores de los cereales, el azúcar y los aceites vegetales debido a cosechas abundantes, una demanda en desaceleración y un dólar más fuerte, aseguró la FAO.