El uso para fines comerciales de uno de los recintos culturales más prestigiosos de Francia, el Museo de Orsay, ha provocado indignación entre un amplio sector de la sociedad parisina.

Sin permiso del recinto, tres modelos de la firma de lencería Etam, corretearon en ropa interior por varias salas del museo, luego de despojarse de sus gabardinas, seguidas por un camarógrafo. Las imágenes fueron grabadas en diciembre, pero el video fue colocado el lunes en el canal de YouTube de la marca para anunciar el próximo lanzamiento de la colección primavera-verano de esa compañía, además de ser distribuido por correo electrónico entre varios clientes.

Las reacciones no se hicieron esperar. Decenas de cibernautas criticaron, en primera instancia, a los directivos por permitir el uso del Museo de Orsay como locación para un comercial de ese tipo: Si la implicación del museo se confirma, más allá de la voracidad y el uso que se dio al espacio, se ha llegado muy lejos, ningún museo jamás se habría atrevido a hacerlo.

De inmediato, la directora de Comunicación de ese espacio cultural, Amélie Hardivillier, confirmó que la grabación del anuncio se había realizado sin permiso e, inclusive, afirmó que se planea denunciar a la firma Etam.

El video dura un minuto y muestra cómo tres chicas se quitan los abrigos en una de las salas del museo dedicado a las artes plásticas del siglo XIX, especialmente famoso por su acervo del impresionismo. Lo hacen frente a varios cuadros de Eugene Delacroix.

Los visitantes las miran con incredulidad, mientras ellas corren y bromean hacia la salida, sin que ningún vigilante las intercepte. La marca Etam tiene varios comerciales parecidos, protagonizados por las mismas modelos que pasean en lencería en diversas locaciones parisinas, como la Torre Eiffel.

La noticia, difundida este martes por el diario Liberation, añade que Hardivillier explicó que ella es también la responsable de las autorizaciones de los rodajes y un guión como el que realizó Etam jamás habría sido aceptado, es inimaginable. Todo se hizo sin saberlo nosotros, el museo jamás fue consultado.

Agregó que, en contraste con lo que se observa en el video, las chicas no se pasearon libremente en lencería, se les llamó la atención en varias ocasiones, un conservador les dijo que se vistieran y ellas argumentaron que se trataba de una despedida de soltera.

La vocación del recinto es no dejar a una marca apropiarse el Museo de Orsay para fines publicitarios, por lo cual el área jurídica del recinto prepara una carta para protestar oficialmente ante la empresa, presentar una denuncia y solicitar que se retire el video de Internet.

No obstante, el video de Etam grabado en el Museo de Orsay sigue difundiéndose. Llevaba ayer 2 mil 200 vistas, contra el más popular de los comerciales de la firma, titulado Desafíos sexy, que registraba 5 mil.

Etam, grupo líder de las cadenas de lencería en Europa, con 350 tiendas en 22 países, dijo a la prensa francesa que asumía plenamente el disgusto causado: “quisimos crear un happening divertido y ligero”, y no dio más explicaciones.

La molestia se acrecentó entre los visitantes del Museo de Orsay, porque el recinto les prohíbe tomar fotos en las salas.

En México, varios casos

En México, los recientes años ha habido varios casos de uso de recintos culturales para fines comerciales, pero sólo en una ocasión se sancionó a los responsables. En 2007, el director general de Bibliotecas, Saúl Juárez, renunció a su cargo luego de que se dio a conocer que la biblioteca Vasconcelos fue utilizada por una tienda departamental como locación para la producción de un catálogo comercial de modas, sin cobrar un centavo y violando el reglamento para ese tipo de recintos, de uso exclusivo para servicios bibliotecarios.

La Jornada también ha documentado (9 de noviembre de 2011) que el Museo Nacional de Arte ha sido utilizado como locación de comerciales de antrigripales, telenovelas de Televisa, set de programas de radio de espectáculos, escenario de cenas románticas para entrega de anillos de compromiso o para la presentación de nuevos modelos de automóviles, entre otros actos comerciales.

Mientras, el Museo Nacional de Antropología ha sido foro para la presentación del uniforme de la Selección Mexicana, clausuras de fin de cursos de escuelas privadas, encuentros gerenciales de empresas, como Coca-Cola, presentaciones de teléfonos celulares, cenas de gala de farmacéuticas, bufetes de abogados, inmobiliarias, bancos y fabricantes de cosméticos, entre otros (19 de diciembre de 2011).