Managua, 10 de enero. Daniel Ortega, líder de la revolución sandinista, asumió hoy su tercer mandato presidencial en un acto multitudinario en la céntrica Plaza de la Revolución ante representantes de más de 30 delegaciones internacionales, entre los que destacaban su par venezolano, Hugo Chávez, y el iraní Mahmud Ajmadineyad, así como el heredero de la corona española, el príncipe Felipe de Borbón.

Ortega inició su segundo periodo consecutivo (el anterior fue de 1985 a 1990) en presencia también de obispos y los principales empresarios nicaragüenses. Ante unos 8 mil invitados y en una colorida ceremonia, juró ante el presidente de la Asamblea Nacional, René Núñez.

Con el triunfo de su partido, Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), con más de 62 por ciento de los votos en noviembre pasado, Ortega, de 66 años, tendrá más de dos tercios del Congreso y ahora se propone dar continuidad a su proyecto cristiano, socialista y solidario, acorde con sus programas sociales de gratuidad en salud y educación.

Encara también el problema de la pobreza en que viven 45 por ciento de los casi 6 millones de habitantes, con un crecimiento de 4.5 por ciento en 2011.

Chávez, el principal aliado de Nicaragua, con un aporte de su gobierno de unos 500 millones de dólares anuales en ayuda, felicitó a Ortega por este día histórico, al destacar que con su tercer mandato comienza un nuevo periodo muy importante, no sólo para Nicaragua, también para la Alba, para Centroamérica. Ensalzó que la victoria es un sol que ha renacido en esta tierra para abrir un nuevo ciclo por el mismo rumbo revolucionario.

Ajmadineyad, quien cumple en Nicaragua su segunda etapa de una gira por América Latina, se declaró muy contento de estar en la tierra de la revolución y saludó a su hermano revolucionario Ortega. Subrayó que los pueblos nicaragüense e iraní, en puntos diferentes de la Tierra, están en lucha por establecer la solidaridad y la justicia.

Cuba estuvo representada por el vicepresidente Ramiro Valdés, comandante histórico, quien felicitó a Ortega y abogó por seguir profundizando la cooperación entre los dos países. A su vez, el príncipe Felipe de Borbón destacó que el compromiso de España en materia de cooperación ha sido siempre fuerte desde hace más de 25 años, y lo seguirá siendo en la medida de nuestras posibilidades.