Madrid. El presidente del gobierno español, el conservador Mariano Rajoy, dijo que el ajuste total para 2012, que lo llevó el jueves pasado a anunciar medidas difíciles e impopulares, será de entre 37 mil y 40 mil millones de euros, al tiempo que defendió el alza de impuestos y aseguró que no planea aumentar el IVA ni crear un banco malo. El déficit público de las 17 regiones autonómicas alcanzó 2.7 por ciento del PIB a finales de 2011, más del doble del objetivo fijado (1.3 por ciento), anunció Rajoy, y las acusó de gran parte de la desviación del país. Los gobiernos autonómicos, fuertemente endeudados desde el estallido de la burbuja inmobiliaria en 2008, fueron responsables de 15 mil millones de euros de los 20 mil en que el déficit público español se desvió respecto a su objetivo, declaró. Las dos principales amenazas que enfrenta el gobierno español para encarar la crisis y cumplir sus objetivos son el sector bancario y las 17 autonomías, que acumulan una deuda de 135 mil 151 millones de euros, muchas con gobiernos emanados del Partido Popular, según el ministro de Economía Luis de Guindos.