El dirigente del Partido Acción Nacional (PAN), Gustavo Madero, confirmó ayer que el presidente Felipe Calderón y él fueron los impulsores de la consulta indicativa para medir la fuerza real de los tres precandidatos presidenciales entre la militancia albiazul, pero rechazó que dicha encuesta tuviera como propósito reposicionar a Ernesto Cordero y sacar de la contienda a Santiago Creel Miranda.

En una entrevista radiofónica, insistió en que la consulta no tenía ninguna dedicatoria y cualquier interpretación en ese sentido es tratar de construir una novela y ponerle sospechosismo a cualquier acción que se propone.

Madero destacó que sólo la elección del 5 de febrero próximo, cuando se realizará la primera vuelta para decidir quién será el candidato presidencial del PAN, será la que baje o suba a los candidatos y no alguna acción artificial.

Explicó que al promover la consulta para el 15 de enero se buscaba aprovecharla para elegir a diputados plurinominales, pero al revisar que los comicios se efectuarían solamente en 68 distritos, se vio que el ejercicio perdía representatividad y por ello se desechó.