Ernesto Cordero, precandidato del Partido Acción Nacional (PAN) a la Presidencia, dijo apoyar una jornada indicativa para conocer las preferencias de la militancia entre los tres panistas que aspiran a esa posición, lo cual no implica que alguien deba abandonar el proceso.

Otro de los aspirantes, Santiago Creel, sostuvo que el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PAN no le ha notificado variantes sobre la convocatoria. Cambiar las reglas a mitad del camino no se puede hacer, aseveró.

Entre martes y miércoles el blanquiazul definirá si se realiza esa jornada, ya que el CEN plantea que el 15 de enero, en el contexto de las elecciones nacionales de ese partido para nombrar candidatos a diputados plurinominales, se podría realizar también la votación indicativa, no vinculatoria, para definir las preferencias, informó Cecilia Romero, secretaria general.

Explicó que lo anterior permitirá que los precandidatos decidan si llegan hasta allí, continúan o refuerzan su precampaña.

Cordero advirtió: que nadie se vaya con la finta de lo que dicen las encuestas sobre lo que la militancia piensa. Aunque dijo desconocer de dónde salió la propuesta, dio detalles de ella: es una especie de jornada electoral. Se abrirían centros de votación en los cuales la militancia se manifestaría, afirmó. Aseguró que eso no significa cambiar las reglas del juego.

Creel pidió que su partido se ciña a la convocatoria. Hay reglas claras y vamos a sacar el proceso interno en forma armónica y el partido saldrá fortalecido, expresó.

En cuanto a su posible declinación, señaló: voy para adelante con todo. Me informan que en sondeos de fin de año la campaña está fortalecida.

En un comunicado, el PAN explicó que se convocó a reunión urgente del CEN para revisar el estado de las precampañas, ya que se considera necesario analizar las posibles consecuencias de la reciente decisión del Instituto Federal Electoral (IFE) en relación con los actos que se consideran válidos durante las precampañas electorales.

Agregó que les preocupa la disposición del IFE, pues con su interpretación anula los propósitos de la reforma electoral de reducir los tiempos de campaña y de separar con claridad las precampañas entre aspirantes de un mismo partido y las campañas propiamente dichas.

Esa disposición modifica las condiciones en que el PAN ha planeado y ejecutado sus campañas y, por ello, ha iniciado conversaciones con los tres precandidatos para analizar la situación y responder adecuadamente.