Klimt plasmó en sus cuadros el saber y el progreso en las artes y las ciencias de una época de cambios y rupturas.

En la Viena de 1900 tuvo lugar una concentración cultural en todos los ámbitos. En la literatura y las bellas artes, en la arquitectura y en la música, aparecieron nuevas y precursoras tendencias con una densidad y rapidez inusitadas.

En 1910, la capital austriaca, con sus 2 millones de habitantes, era la quinta ciudad del mundo y el centro cultural de la Europa Central.

Gustav Klimt reflejó esa pujanza al decorar algunos edificios de la emblemática Ringstrasse o Avenida del Ring (la famosa calle circular que rodea el centro de Viena), como las escalinatas del Museo de Bellas Artes y del Burgtheater.

Austria le dedicará el año entero para celebrar el 150 aniversario de su natalicio. El museo del Belvedere presentará de manera excepcional la totalidad de su acervo de cuadros del artista (del 6 de julio al 2 de septiembre), mientras la muestra Gustav Klimt/Josef Hoffmann. Pioneros del Arte Moderno se exhibe desde el 25 de octubre de 2011 y hasta el 4 de marzo de 2012, para mostrar la intensa colaboración que existió entre ambas personalidades, la cual comenzó con la fundación de la Secesión de Viena en 1897 y acabó con la muerte de Klimt, en 1918.

Encargos, bocetos y decoración

Con el título Gustav Klimt en el Kunsthistorisches Museum (Museo de Historia del Arte), ese recinto mostrará al público la etapa media de la creatividad del artista, que consta de 13 obras importantes y los bocetos de las mismas para la escalera principal del museo, los cuales se mostraron por última vez en Zurich, en 1992.

La muestra –que se exhibirá del 14 de febrero al 6 de mayo de 2012– presenta las pinturas realizadas por Klimt tras el encargo de los frescos del techo del Burgtheater solicitado en 1886 a la Compañía de Pintores, integrada por Gustav y Ernst Klimt, y Franz Matsch, a quien también se le encargaron las obras de las pechinas y de las estrechas pinturas entre las columnas de la escalera principal del Kunsthistorisches Museum, en 1890.

Del 16 de mayo al 16 de septiembre de este año, el Museo de Viena, que dispone de una colección valiosísima de obras de Klimt, presentará por primera vez 400 dibujos como parte de la exposición Klimt. La colección del Museo de Viena, la cual permitirá conocer todas las facetas de los diferentes grupos temáticos de sus obras (por ejemplo, la Secesión, esbozos de los cuadros de las Facultades y dibujos eróticos).

Además de los dibujos se exhibirán algunos cuadros, entre otros la obra de arte más importante del museo, el Retrato de Emilie Flöge, del año 1902, así como el dibujo de Klimt muerto, de Egon Schiele.

El pintor en la intimidad

Del 14 de marzo al 10 de junio de 2012, La Albertina presentará la exposición Klimt-Dibujos, que reúne más de 170 esbozos del pintor. Asimismo, la muestra se completa con extraordinarios préstamos de colecciones austriacas e internacionales.

Otras obras importantes de Klimt se exhibirán en el Museo Leopold para abordar su vida privada a través de su correspondencia (del 24 de febrero al 27 de agosto), y el Museo de Artes Aplicadas/Arte Contemporáneo MAK, así como en la Biblioteca Nacional, que dan testimonio del trabajo de este pintor, de sus contemporáneos y de su época en general.

Como parte de las actividades conmemorativas en torno al pintor, en la ciudad de Viena se realizará un itinerario especial sobre Klimt y el Modernismo, además de paseos temáticos con enfoque especial en el Belvedere, donde está la principal colección con 22 telas del artista y sobre todo el famoso Beso.

También habrá shopping, bajo el sello de Klimt&Co, con arte, moda, diseño y menús inspirados en el artista. Colecciones de porcelanas de edición limitada, joyas y simples objetos de decoración serán también el motivo del movimiento Wiener Werkstätte, que signó la era de Klimt.

Además, en verano se podrá visitar una residencia enteramente decorada por el artista poco antes de su muerte, así como un centro de documentación, el cual abrirá el 14 de julio en el lago Attersee, en Alta Austria, al oeste de Viena.

Finalmente, también será reabierta, tras una larga restauración, la casa de Klimt –que fue su taller– en el distrito 13 de la capital austriaca.