Texcoco, Méx., 29 de diciembre. La plaga del dragón amarillo, que afecta a los cítricos, podría destruir en ocho años 40 por ciento de la producción nacional de naranja, limón, toronja y mandarina si no se controla desde ahora, advirtieron especialistas de la Universidad Autónoma Chapingo (UACh).

Gustavo Almaguer Vargas, profesor investigador del Departamento de Fitotecnia de esa casa de estudios, reveló que detectó la plaga conocida como Huanglongbing, causada por la bacteria Candidatus liberibacter, transmitida por el insecto Diaphorina citri.

El también investigador del Centro de Investigaciones Económicas, Sociales y Tecnológicas de la Agroindustria y la Agricultura Mundial de la UACh advirtió que si las autoridades no combaten la plaga, 70 por ciento de los productores (unas 100 mil personas) podrían resultar afectados.

La bacteria, explicó Almaguer Vargas, ataca el florema de los cítricos y no permite a la planta enviar a los frutos los carbohidratos que pruduce en sus hojas. El Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura esbozó en 2010 un escenario drástico: más de 41 por ciento de la producción nacional de cítricos desaparecerá con esta enfermedad, reportada a mediados de 1700 en India, al siguiente siglo en China, luego en Filipinas, Indonesia, África del Sur, Brasil y Estados Unidos, con saldo de más de 100 millones de árboles muertos en todo el mundo.

El especialista de la UACh agregó que en México se detectó por primera vez en agosto de 2009 en Tizimín, Yucatán, de donde se logró erradicarla, y en abril de 2010 en Colima, donde hay muchas huertas infectadas.

Explicó que en México se cultivan 530 mil hectáreas con cítricos, pero si se propaga la plaga podrían perderse cerca de 220 mil.

Refirió que de las 180 mil unidades de producción de cítricos que hay en México podrían quedar de 30 mil a 60 mil a largo plazo.

La UACh y otras instituciones buscan convencer a los productores de controlar el vector en forma integral, tanto en forma biológica, con el uso de la Tamarixia (una especie de avispa que se come a la Diaphorina citri), como con químicos.

La enfermedad tiende a desplazarse desde parcelas donde no hay control del vector y provoca la muerte de 50 por ciento de los árboles, detalló Almaguer Vargas.

Sin embargo, aclaró, cuando hay organización y control integral de todas las parcelas, sólo se pierde de uno a 5 por ciento de plantas jóvenes. Si no hay control en ninguna parcela pueden morir más de 80 por ciento.

El especialista reconoció que los productores están incrédulos y apáticos ante los riesgos del dragón amarillo, porque en ocasiones anteriores se les advirtió de otras plagas y no destruyeron sus cultivos, como se había pronosticado.

Ni siquiera los productores de Colima, que ya tienen la plaga, han tomado acciones colectivas para reducir daños. Más aún, hubo quienes se ampararon para evitar que Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria eliminara los árboles enfermos.

Almaguer Vargas alertó que de continuar los estragos en las huertas el precio de los cítricos prácticamente se duplicaría.

Los más afectados serían los consumidores, pues toda la producción nacional de limón es para consumo interno, al igual que toda la de mandarina, 85 por ciento de la naranja y 30 por ciento de la toronja.

Sólo les dieron algo de alambre para cercar

Juan Carlos Flores Carrillo, corresponsal

Colima, Col., 29 de diciembre. Más de mil hectáreas de platanares en la comunidad de Marabasco, municipio de Manzanillo, permanecen sin servicio de riego a causa de los daños que dejó el huracán Jova en octubre.

Productores locales denunciaron que el único apoyo que recibieron del gobierno federal fue la entrega de alambre para cercar sus ejidos.

Francisco Hueso Alcaraz, presidente de la Asociación de Productores de Plátano de Colima, señaló que los caminos que llevan hacia gran parte de las zonas cultivadas siguen intransitables.

Además, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) no ha restablecido el suministro del líquido y se corre el riesgo de perder la producción de fruta.

En la zona afectada, que abarca más de mil hectáreas en Marabasco, cuatro ejidos no han sido debidamente atendidos. Tenemos problemas con la burocracia y negligencia administrativa, aseguró el líder de los productores.

Aclaró que ni el gobierno federal ni el estatal les han entregado ayuda. Lo único que se entregó fue alambre y no ajustó para todos, o por lo menos ofrecieron una cantidad y creo que entregaron 50 por ciento de lo prometido, puntualizó.

Precisó que hay cerca de 100 productores afectados, que hasta la fecha no han podido recuperarse. Están con deudas hasta el tope y no han podido realizar actividades para solventar sus broncas. Tenemos parcelas inundadas con metro y medio de arena; muy pocos han podido restablecer sus huertas, acotó.

Hueso Alcaraz informó que tanto el secretario de Desarrollo Rural del estado, José Verduzco, como el delegado de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, Salvador Becerra “dijeron en octubre que en una semana tendríamos alambre –del que se entregó una parte– y que posteriormente darían información de los apoyos subsecuentes, pero no ha habido nada”.