Miércoles 28 de diciembre de 2011, p. 25
Damasco, 27 de diciembre. Observadores de la Liga Árabe comenzaron este martes su misión en Siria en la ciudad de Homs, bastión de la revuelta contra el régimen, donde prosiguieron las protestas antigubernamentales y se entrevistaron con el gobernador Ghasan Abdel Al, en cumplimiento del protocolo acordado con el gobierno sirio.
Decenas de miles de personas protestaron en el barrio de Jalidiyé, en Homs, para denunciar los crímenes del régimen
del presidente Bashar Assad, mientras otros 70 mil se manifestaron en la céntrica plaza de la ciudad en repudio a la muerte, el lunes, de unos 30 civiles a manos de las fuerzas del orden, manifestó el opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), con sede en Londres.
Reprimen manifestación
El grupo opositor comentó que más de una decena de personas murieron en las últimas horas; el nuevo balance es de unos 44 civiles fallecidos. Añadió, por lo que respecta a la jornada de este día, que las fuerzas de seguridad lanzaron gases lacrimógenos contra los manifestantes que intentaban ingresar en la plaza del centro de Homs para dispersarlos y causaron varios heridos.
La delegación de observadores de la Liga Árabe empezó su reunión con el gobernador de Homs, Ghasan Abdel Al
, informó el canal privado Dunia, y que la delegación también tenía previsto viajar a Hama (norte) e Idleb (noroeste).
Mientras, el ejército optó por replegarse parcialmente con el retiro unos 11 tanques del barrio Baba Amro, en Homs, enfatizó Rami Abdel Rahman, quien encabeza el OSDH.
Un grupo terrorista
saboteó el martes un gasoducto entre Kafar Abd y Rastán, en Homs, provocando una fuga de 150 mil metros cúbicos de gas, reportó la agencia oficial Sana.
Recordó que ese gasoducto fue atacado el 12 de diciembre. La infraestructura de hidrocarburos ha sufrido varios incidentes desde el 15 de marzo, cuando comenzaron las protestas.
Estados Unidos acusó a Siria de haber intensificado la represión antes de que llegaran los observadores internacionales. El régimen aprovechó los últimos días para escalar sus ataques a varias ciudades, barrios y hogares previo al despliegue de los observadores
, dijo el portavoz del Departamento de Estado, Mark Toner, por lo que condenamos esta escalada de violencia
.
También amenazó con utilizar otros medios
para proteger a los civiles.