A partir del diagnóstico presentado en su encuentro nacional –en julio de este año–, la Red Mexicana de Trabajo Sexual editó una historieta para mostrar la violencia misógina de que son objeto las trabajadoras sexuales en el contexto de la fallida guerra contra el crimen organizado y de la cruzada nacional contra la trata de personas.

Jaime Montejo, activista de la asociación Brigada Callejera, dijo en entrevista que en los costos de la guerra de Calderón no se menciona a las trabajadoras sexuales ni que el marco jurídico las hace víctimas de violencia, pues busca resultados para cumplir compromisos internacionales aunque se sacrifiquen garantías individuales.

Con un tiraje de mil ejemplares, las historietas se distribuirán de manera gratuita en las entidades con mayor índice de asesinatos de trabajadoras sexuales –de acuerdo con la numeralia de la propia organización–, como son Nuevo León, Chihuahua, Oaxaca y Tamaulipas, para alertarlas de los riesgos.

La publicación (octava dentro de la serie que conforma la campaña de movilización social contra la trata de personas) refiere que entre 1993 y 2005 el promedio de feminicidios mensuales de trabajadoras sexuales por entidad era de seis a siete, y que fue durante el sexenio de Vicente Fox que se registró un aumento de dichos crímenes (entre 18 y 20 al mes por estado).

Sin embargo, expone, es en el sexenio de Calderón en el cual se han disparado los reportes de crímenes de género contra las trabajadoras sexuales.

“Tanto en la guerra contra el crimen y en la cruzada contra la trata se incita al odio hacia este sector social y se normaliza esta situación como si se tratara sólo de efectos colaterales de una guerra justa, donde las mujeres de todas las edades son más susceptibles de ser objeto de violencia terminal feminicida”.

Represión policiaca

La historieta ilustra casos emblemáticos en contra de trabajadoras sexuales en toda la República por múltiples razones, como el asesinato de aquellas que denuncian violencia policiaca, se organizan contra la represión de la policía o denuncian extorsión de los cuerpos policiacos.

Otros casos son los asesinatos de chicas que no quieren ser reclutadas como panteras del crimen organizado u orejas del régimen. Hay una larga lista en Oaxaca y Morelos de bailarinas asesinadas porque no quisieron ser reclutadas, explicó Montejo.

Ilustra, también, los asesinatos por discriminación debido a que la ocupación que desempeñan es considerada impropia de mujeres de bien.