Washington, 20 de diciembre. Estados Unidos reducirá el año entrante el número de soldados que mantiene en la frontera con México, unos mil 200, mientras despliega más equipos de vigilancia aérea para garantizar la seguridad en la zona, informaron autoridades estadunidenses este martes.

La nueva estrategia prevé añadir equipos aéreos multiusos, equipados con las tecnologías de vigilancia y reconocimiento de más reciente creación, indicó un comunicado conjunto de los departamentos de Seguridad Interna y Defensa, que sin embargo no especifica la cantidad de equipamiento.

Los recursos adicionales permitirán reducir el número de soldados de la Guardia Nacional en la frontera suroeste mientras se refuerza la seguridad en la línea divisoria, explicó.

El gobierno de Barack Obama desplegó a mediados de 2010 mil 200 soldados en la frontera, a solicitud de gobernadores y legisladores de estados fronterizos, ante el temor de que se desbordara la violencia por el crimen organizado, que ha dejado miles de muertos en México.

Este año, Obama decidió prorrogar la misión de la Guardia Nacional, que en principio era de un año. Los soldados no tienen potestad para efectuar arrestos y básicamente se dedican a labores de vigilancia.

Pero la violencia en México no se ha esparcido. Las zonas fronterizas tienen tasas bajas de criminalidad, afirma el gobierno, mientras disminuye el número de indocumentados detenidos y aumenta el de incautación de drogas.

A la vez, la cantidad de agentes de la Patrulla Fronteriza se ha elevado a más de 21 mil, el doble que en 2004.

El comunicado no especificó cuántos soldados implicaría la reducción, pero señaló que el periodo de transición hacia la nueva estrategia comenzará en enero y los equipos aéreos adicionales llegarán a partir del primero de marzo.

El Departamento de Defensa dará apoyo aéreo a la Patrulla Fronteriza para permitirle una capacidad de respuesta más rápida en un ambiente dinámico como la frontera, lo que mejorará la detección y disuasión de actividades ilegales, sostiene el documento.

Varios aviones no tripulados o drones ya son utilizados en la zona fronteriza.

El anuncio no tardó en ser criticado por la oposición republicana, que demanda mayor seguridad con personal en la zona.

La decisión empeora la situación de una frontera que ya es porosa, dijo el jefe de la Comisión Judicial de la Cámara de Representantes, el republicano Lamar Smith (Texas), en un comunicado.

Al contrario, legisladores demócratas saludaron la medida.

El foco debe estar menos en tener soldados en el terreno y más en estrategias prácticas y probadas que usen inteligentemente los limitados recursos gubernamentales, expresó Silvestre Reyes, también congresista por Texas.