El gobernador Mario López Valdez advirtió a los 36 ex trabajadores del Hospital de la Mujer que fueron despedidos la semana pasada que su gobierno no las aceptará de nuevo como empleadas del sector salud a menos que retiren la demanda laboral que interpusieron para exigir mejores salarios y prestaciones.

Las enfermeras tuvieron una audiencia privada de cerca de dos horas con el mandatario, en la Unidad Administrativa. Dijeron que el gobernador les advirtió que si insisten en mantener la querella laboral ordenará que no las reciban en ninguna otra dependencia.

La comisión de manifestantes, compuesta por seis ex empleadas, pidió a López Valdez que resuelva su situación, les incremente el salario y mejore las prestaciones, a lo que se negó y sólo les ofreció liquidaciones de 25 mil pesos.

No se permitió el ingreso a Yadira Tadeo Bringas, la abogada que defiende a las 35 enfermeras y un camillero que el 8 de septiembre interpusieron una demanda ante la Junta Local de Conciliación y Arbitraje.

Las inconformes, que realizaron plantones y otras protestas en la Unidad Administrativa y en el Hospital de la Mujer, ambos en Culiacán, perciben cerca de 4 mil pesos al mes, y el resto del personal alrededor de 15 mil, aunque tienen la misma clave en el escalafón y realizan el mismo trabajo. Además, no tienen seguro social ni prestaciones como aguinaldo y fondo de pensión.

Las enfermeras fueron despedidas la semana pasada por órdenes del secretario de Salud estatal, Ernesto Echeverría.

De inmediato fueron contratados pasantes de enfermería para sustituir a las inconformes, quienes anunciaron que este miércoles iniciarán un plantón frente al Hospital de la Mujer.