Ciudad Juárez, Chih., 16 de diciembre. Miembros de organizaciones no gubernamentales (ONG) y familiares de mujeres desaparecidas realizaron diversas manifestaciones en esta frontera y en la capital del estado para conmemorar el primer aniversario luctuoso de la activista Marisela Escobedo, asesinada hace un año frente al palacio de gobierno de Chihuahua, y exigir justicia y castigo para los responsables.

Una de las protestas se realizó en el consulado de México en El Paso, Texas, donde se encuentra solicitando asilo Juan Manuel Frayre Escobedo, hijo de Marisela, quien aseguró que mienten funcionarios de la Fiscalía General del Estado (FGE), porque el hombre que señalan como sospechoso de matar a su madre no es la persona que le disparó.

“Héctor Miguel Flores Morán, El Payaso (quien según la dependencia murió en una balacera ocurrida en septiembre), no es el homicida de mi mamá. No descarto que la pistola calibre 9 milímetros sí esté relacionada con el crimen”, puntualizó.

Reveló que en el curso de esta semana, cuando se encontraba en un centro comercial de El Paso, dos hombres se le acercaron para amenazarlo de muerte si continúa exigiendo el esclarecimiento del homicidio de su progenitora.

No voy a callarme, advirtió. Asimismo, subrayó que lo que está de por medio es que haya justicia para su madre. Indicó que es la segunda amenaza que recibe, pues la primera fue el 18 de diciembre de 2010 en los funerales de Marisela.

Las manifestaciones en Ciudad Juárez comenzaron la mañana del viernes con un plantón de miembros del Frente Plural Ciudadano (FPC) frente a la FGE.

Protestamos por la embestida represiva de las últimas semanas contra activistas, como Norma Andrade, y contra movimientos sociales en todo el país, expuso Julián Contreras, integrante de la agrupación.

Marisela nos enseño a luchar por nuestras hijas. Aquí, en el imperio de la ineptitud, luchamos por justicia, se leía en una de las mantas.

Más tarde, miembros de ONG y familiares de mujeres desaparecidas en la urbe fronteriza marcharon de la FGE hasta la Ciudad Judicial (sede de los juzgados) para recordar la ruta que en varias ocasiones recorrió Marisela exigiendo justicia para su hija Ruby Marisol Frayre Escobedo, ultimada en agosto de 2008.

Ahí gritaron: ¡Vivas se las llevaron, vivas las queremos!, ¡queremos resultados, no simulación!, ¡justicia para nuestras hijas!, entre otras consignas.

Mientras, en Chihuahua capital, un tribunal de conciencia, integrado por organizaciones civiles, condenó al gobierno de Chihuahua por el cúmulo de errores y omisiones en la investigación de los homicidios de Marisela y su hija Rubí Frayre.

Exigió a la FGE transparentar las indagatorias sobre el presunto autor material del crimen (Héctor Miguel Flores Morán), a quien la dependencia identificó después de que supuestamente murió en una balacera ocurrida en septiembre en un bar de la capital del estado.

A las puertas del palacio de gobierno, donde hace un año Marisela Escobedo fue ultimada de un tiro en la cabeza, integrantes de una treintena de ONG analizaron los expedientes de los dos crímenes y concluyeron que a las dos mujeres se les robó el acceso a la justicia.

Demandaron a funcionarios de la FGE que acudan a El Paso y se reúnan con los familiares de Marisela, exiliados en esa ciudad, y les informen sobre los resultados que dieron a conocer, los cuales consideraron una cortina de humo, para ocultar la ineficiencia en la solución de los homicidios.

Las organizaciones civiles aseguraron que en Chihuahua “hay impunidad sistemática en los crímenes de mujeres cometidos históricamente, y que siguen ocurriendo, y las autoridades recurren al señalamiento de chivos expiatorios para desviar la atención sobre esos delitos”.

Ese clima de impunidad –dijeron– es lo que ha propiciado ataques contra activistas como Josefina Reyes, Paz Rodríguez y Marisela Escobedo, y recientemente el intento de homicidio contra Norma Andrade. Denunciaron que en lo que va del año se han perpetrado 342 feminicidios en el estado y se tienen documentados más de 220 casos de mujeres desaparecidas.

Mientras tanto, en la ciudad de México, unos 70 activistas de organizaciones sindicales, feministas, estudiantiles y de derechos humanos realizaron una marcha del Ángel de la Independencia al Hemiciclo a Juárez para demandar el esclarecimiento del asesinato de Marisela Escobedo y el debido castigo a los responsables.

Con mantas y pancartas, los manifestantes recordaron que ha pasado un año desde la ejecución de la activista chihuahuense sin que haya suficiente claridad sobre los autores de dicho crimen.

Además, lamentaron que en el reciente año el clima de violencia contra defensores de derechos humanos haya arreciado, con el asesinato de Nepomuceno Moreno, Trinidad de la Cruz y Pedro Leyva, el atentado contra Norma Andrade y el secuestro de Eva Alarcón y Marcial Bautista.

Con información de Fernando Camacho Servín