legar a grabar el disco número 17 a los 61 años, con tan magnífica salud artística, llena de vida a quien le escuche y marca ejemplo a toda una generación de jóvenes alelados por el conformismo estético y lírico. El rasposísimo y percudido actor, cantante y performer californiano Tom Waits reaparece tras siete años de no grabar álbum alguno, con una claridad musical y una energía tales, que apabulla y enchina la piel. Bad as me (2011) es el disco de estreno, quizá uno de los mejores del año que termina, desde ese universo propio que sólo suena a él, mas no por ello se vuelve repetitivo, pues cuando la composición, a partir de un estilo patentado, es capaz de variar en intensidades y arreglos, y sonar a nuevo, sorprender en cada frase, cada imagen evocada, cada personaje cincelado, cada fraseo histriónico bien escupido, puede describirse a un artista genuino, a un caudal de creatividad que no se apaga.

Fiel a su entusiasmo explorador y acústico, cabalga sobre ritmos clásicos para sobre ellos montar su imaginería: blues, rockabilly, rhythm & blues, jazz, country, cabaret, galopan muy bien cepillados, por entre superposiciones tímbricas particulares, intensidades percusivas, banjos, pianos desvencijados, metales, violines, acordeones, slides fantasmales, para hacer aterrizar austeras pero penetrantes canciones con coro y estribillo, en el sentido más clásico y claro del concepto, con invitados de primera: Keith Richards, Marc Ribot y David Hidalgo en guitarras (el primero, haciendo coros en un tema), así como Flea en el bajo en un track, entre otros, sin olvidar la producción y coautoría de su mujer Kathleen Brennan.

Malo como yo es una puesta al día del rhythm and blues antiguo, tanto con temas briosos, llenos de humor y chifladura espasmódica, como con baladas nostálgicas, dolorosas, reales, sin un gramo de pretensión ni artificio. No es un disco que huela a viejo ni a nostalgia, sino un postulado contemporáneo de locura, amor y comentario social, musicalmente placentero, fluido, como sólo él sabe hacerlo: “Alguien por ahí está haciendo dinero, mientras corre sangre en las calles; no digas nada, alíneate… Todo mundo está hablando al mismo tiempo”.

Disco impecable, el de este viejo lobo de mar, un lujo, lejano al anquilosamiento, con un ánimo y creatividad que ya quisieran muchos de 20. ¿Será mucho pedir que alguien por favor traiga a Tom Waits a actuar a México? Gracias.

Ángeles Azules, Zoé, Malditos, Silverio

La capital y sus aires fríos siguen cobijando a una noche que no para en música, fiesta y distorsión, en plenas posadas.

Viernes 16: 1. Cumbia que gusta a los rocanroleros: Los Ángeles Azules. Pasagüero (Motolinia 33, Centro); 22 horas, $250. 2. Ay, dolor, ya me volviste a dar, con San Pascualito Rey y Dedo Caracol. Alicia (Cuauhtémoc 91-A, Roma); 20 horas, $100. 3. La Castañeda tocará sus oscuros temas clásicos, y los de La otra llama (2010), con parefernalia escénica actualizada. Metropólitan (Independencia 90, Centro); 21 horas, $150 a $480. 4. La Gusana Ciega en concierto acústico, con temas poco usuales de su repertorio. Lunario; 21 horas, $350. 5. El funkie-trónico de Dapuntobeat. Imperial (Álvaro Obregón 293, Condesa); 22 horas, $150.

Sábado 17: 1. Austin TV sigue presentando su intrincado álbum Caballeros del Albedrío (2011), y de Monterrey, Bam Bam. Plaza Condesa (Juan Escutia 4, Condesa); 22 horas, $260 a $400. 2. Los Malditos Cocodrilos (ex Maldita Vecindad) no paran de dar lata musical; también: Su Mercé. Pasagüero (dirección citada); 22 horas, $100. 3. La última ola, posada surfera con Twin Tones, Telekrimen, Elásticos, Cavernarios, entre otros. Alicia (dirección citada); 20 horas, $70. 4. Su servidora estará eligiendo la música de la noche en Pulquería Insurgentes (Insurgentes 226, Roma); 22 horas, entrada libre.

Domingo 18: 1. El último skándalo, tardeada eskata: Los Victorios, Maskatesta, Skandalosos, entre otros. Alicia (dirección citada); 15 horas, $80. 2. Buen año ha sido para Zoé, al alcanzar primer lugar de ventas en España, Estados Unidos y Latinoamérica por su unplugged Música de fondo (2011) y nombrado por iTunes Mejor Álbum Latino 2011. Para verlos de cerca, tocarán en Plaza Condesa (dirección citada); 20 horas, $850 a $1200.

Martes 20: Posada soez con el electropicante Silverio. Imperial (dirección citada); 22 horas, $150.

Miércoles 21: URSS bajo el árbol, magnífica banda, al lado de Vansen Tiger. Caradura (Nuevo León 73, Condesa); 22 horas, $50.

Jueves 22: Sigue causando furor el combo de synth-punk Robota, con su álbum Vulgar Display of Power (2011). Centro Cultural de España (Guatemala 18, Centro); 21 horas, entrada libre.

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