En Chiapas, 50% de prestadores del servicio están capacitados en planificación familiar, advierte
bloqueaacceso a anticonceptivos, revela informe
Uno de cada cuatro, en desacuerdo con fácil obtención de pastilla de emergencia: Ddeser
Jueves 15 de diciembre de 2011, p. 50
Uno de cada cuatro prestadores de servicios de salud en Guerrero está en desacuerdo
con la fácil obtención de la pastilla de anticoncepción de emergencia, según un sondeo realizado por la Red por los Derechos Sexuales y Reproductivos en México (Ddeser) sobre el acceso, abasto y uso de métodos anticonceptivos en esa entidad y Chiapas.
De acuerdo con el reporte, se detectaron problemas de abasto en tres métodos anticonceptivos en el estado de Guerrero: implantes, inyectables y pastilla de anticoncepción de emergencia, lo cual aunado a la percepción del personal de salud puede convertirse en una barrera para su acceso.
El documento La experiencia de fiscalización de acceso, abasto y uso de metodología anticonceptiva en México: un método de rendición de cuentas desde la sociedad civil, recoge la experiencia de integrantes de la asociación civil quienes asisten a los centros de salud como usuarias simuladas para realizar evaluaciones en la materia.
La organización identificó que en Chiapas sólo 50 por ciento del personal de salud está capacitado en planificación familiar; por municipios, los porcentajes bajan aún más.
También se detectó que dicho personal tenía información errónea sobre los métodos anticonceptivos, ya que mencionaron que la pastilla de anticoncepción de emergencia es abortiva
.
Dichas entidades forman parte de los 12 estados que concentran 75 por ciento del total de las defunciones maternas en el país, además de tener las tasas de fecundidad más altas y encontrarse entre los de menor prevalencia en el uso de anticonceptivos.
Los resultados de la evaluación, realizada en 2009, fueron entregados a las autoridades sanitarias de los estados.
Equidad de Género, Ciudadanía, Trabajo y Familia (asociación civil de la cual forma parte Ddeser) realizó además una campaña integral de la mano de otras organizaciones civiles para alcanzar la meta de mejorar la salud materna, uno de los Objetivos del Milenio.
Entre las recomendaciones generales que dictó a las entidades, se encuentran garantizar el abasto de una amplia gama de métodos anticonceptivos, capacitar y sensibilizar al personal de salud e impulsar campañas de información específicas para la población indígena.