Integrantes de la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México (Fecsm) –organización que agrupa a los alumnos de las 16 escuelas normales rurales del país, entre ellas la Raúl Isidro Burgos, de Ayotzinapa, Guerrero– marcharon ayer del Hemiciclo a Juárez a la Secretaría de Gobernación (SG).

Los normalistas exigen juicio político contra el gobernador de Guerrero, Ángel Aguirre Rivero, y castigo a los responsables materiales e intelectuales de la represión policiaca del lunes pasado, que dejó dos jóvenes asesinados y varios heridos.

Durante la movilización, encabezada por los estudiantes de la normal de Ayotzinapa, se repudiaron las acciones policiacas, se demandó a los gobiernos federal y estatales no criminalizar ni reprimir la protesta social y se reclamó justicia para los caídos.

Se sumaron a la protesta estudiantes de las universidades Nacional Autónoma de México, Autónoma Metropolitana y Autónoma de la Ciudad de México, y del Instituto Politécnico Nacional, así como la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación y organizaciones sociales, quienes manifestaron su solidaridad y apoyo a la lucha de la normal de Ayotzinapa.

En Gobernación, una comisión de la Fecsm fue recibida por Juan Carlos García y Gerardo Salas, subdirectores de la Dirección de Concertación Social de la Subsecretaría de Gobierno. Los normalistas argumentaron que la gravedad del caso ameritaba que fueran atendidos por el titular de la dependencia, Alejandro Poiré, o por el subsecretario de Gobierno, Obdulio Ávila, pero la respuesta fue que tenían que solicitar la audiencia mediante oficio, señalaron los estudiantes, quienes continúan sin revelar sus nombres, por seguridad.

Queremos instalar una comisión conjunta con representantes de Gobernación y de la Fecsm para dar seguimiento a las indagatorias sobre los asesinatos, pero la autoridad federal nos ha demostrado que no tiene intención de diálogo. Continuaremos con las acciones pacíficas hasta alcanzar justicia.

La marcha, en la que participaron unas 800 personas, se desarrolló pacíficamente y pasó por las avenidas Juárez, Balderas, Chapultepec y Bucareli. Con mantas, pancartas y consignas expresaron su repudio por la muerte de dos normalistas y por la situación que hoy enfrenta el país: No queremos Navidad, queremos justicia para Ayotzinapa; El miedo paraliza, la rabia moviliza; No más sangre de estudiantes; Calderón genocida; ¿Cuánta muerte es demasiada? y Gobierno fascista que matas normalistas.

A su paso por las instalaciones de Televisa hicieron un alto para demandar un espacio (en alguno de sus programas informativos) y decir nuestra verdad, pero no fueron atendidos.

Sólo hubo un pequeño conato de violencia en las inmediaciones de Gobernación, cuando encapuchados golpearon a un hombre que les tomaba fotografías. Los normalistas intentaron calmarlos y se deslindaron de esos actos de provocación.

Por otro lado, estudiantes universitarios y docentes se manifestaron frente a la representación del gobierno de Guerrero en el Distrito Federal para exigir castigo a los responsables de la muerte de los dos normalistas.

Entre los inconformes estaban integrantes de la Coalición Trinacional en Defensa de la Educación, que agrupa a profesores y sindicalistas del sector educativo, quienes realizaron pintas en la acera y arrojaron pintura roja sobre el inmueble ubicado en la calle de Arquímides, en Polanco. Demandaron juicio político contra el gobernador.

(Con información de Laura Poy)