Jerusalén, 14 de diciembre. Los emisarios del Cuarteto para Medio Oriente, integrado por Estados Unidos, Rusia, la Unión Europea y la Organización de Naciones Unidas, y el enviado especial Tony Blair, se reunieron hoy por separado con representantes palestinos e israelíes en Jerusalén para intentar reactivar las negociaciones de paz, estancadas desde hace más de un año.

Los emisarios recalcaron la importancia de un intercambio directo entre las partes, sin demora ni condiciones previas, empezando por una reunión preparatoria que conduzca a la presentación de propuestas sobre el territorio y la seguridad, dijo la ONU.

En Cisjordania, en tanto, extremistas judíos pintaron consignas antiárabes y antimusulmanas y quemaron la fachada de la mezquita de Nebi Akasha, en desuso, mientras Israel reabría la rampa que usan los no musulmanes para acceder a la explanada de las mezquitas, tres días después de haber sido cerrada con el argumento de que la estructura temporal de madera supone un riesgo para la seguridad.

Tras el ataque a la mezquita, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, aprobó medidas para reprimir a colonos judíos ultranacionalistas, que van de la detención administrativa a enfrentar juicios militares e incluso la expulsión de Cisjordania de quien incite a la violencia.

En este contexto, el movimiento palestino Hamas reiteró que no reconocerá al Estado de Israel ni detendrá su resistencia armada, durante un acto en la ciudad de Gaza para celebrar los 24 años de su fundación en 1987.

El dirigente de Hamas, Ismail Haniyeh, proclamó que “la resistencia y la lucha armadas son la única opción para liberar el enclave y a toda Palestina.

El brazo armado de Hamas, las Brigadas Ezzedin Al Qassam, reportó que desde 1987 ha matado a mil 365 israelíes y ha herido a otras 6 mil 411 personas, en mil 117 ataques, incluidos 87 atentados suicidas.