El presidente Felipe Calderón envió una iniciativa al Senado, a fin de que se autorice un incremento de 145.8 por ciento en la cuota que México aporta al Fondo Monetario Internacional (FMI). Ello, argumenta el Ejecutivo, a fin de aumentar la influencia del país en la toma de decisiones de ese organismo financiero internacional.

El mandatario explica que de acuerdo con la resolución 66-2 de la junta de gobernadores del FMI, aprobada en diciembre de 2010, la cuota de México pasaría de 3 mil 625.7 millones a 8 mil 912.7 millones en derechos especiales de giro (DEG), lo que equivale a 14 mil 37.7 millones de dólares.

Los DEG, detalla, son activos de reserva internacional creados en 1969 por el FMI como unidad de cuenta del organismo, cuyo valor se determina con base en el promedio ponderado de una canasta integrada por las principales monedas del mundo.

Calderón detalla que la participación de nuestro país en relación con las cuotas totales del organismo pasará de 1.52 a 1.87 por ciento, lo que implica que la posición de México suba de 16 a 14, y que aumente su poder de voto de 1.47 a 1.80 por ciento.

De ser aprobada la iniciativa, recalca Calderón, el 25 por ciento del incremento de las cuotas se pagará en DEG o en monedas de libre uso, mientras que el 75 por ciento restante se abonará en moneda nacional.

Sostuvo que 25 por ciento del aumento, pagadero en divisas, forma parte de las reservas internacionales, y la aportación de 75 por ciento en moneda nacional se realizará a través de un depósito en la cuenta número uno del FMI. Por ello no bajan las reservas internacionales del Banco de México, pues se trata de un cambio en la composición de dichas reservas; tampoco se ve afectada su situación financiera, ya que el incremento de la cuota significa un intercambio de activos.

La iniciativa fue turnada a las comisiones de Hacienda y de Estudios Legislativos, y se espera que se pase hoy mismo al pleno.