Cuernavaca, Mor., 13 de diciembre. Una de cada tres personas en Morelos ha sido víctima de algún delito, de acuerdo con la Encuesta nacional de victimización y percepción sobre seguridad pública 2011, elaborada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

Pese a la estrategia federal y estatal contra el crimen organizado en la entidad, las cifras sugieren que no ha disminuido la incidencia de ilícitos y que las víctimas recurren poco a las autoridades.

Durante 2010 se cometieron en Morelos casi 329 mil delitos (300 por ciento más que en 2009), pero sólo se denunciaron poco más de 40 mil.

Morelos fue uno de los primeros estados en sumarse a la depuración de las corporaciones policiacas, regionalizó su operación e impulsa la creación de un mando único estatal.

No obstante, el estudio señala que 80 por ciento de los morelenses se sienten inseguros y que 260 mil fueron víctimas de algún delito.

Más de la mitad de los más de 5 mil policías estatales y municipales se han sometido a exámenes de control de confianza, según el secretario ejecutivo del Sistema Estatal de Seguridad Pública, José Herrera Chávez.

Esta medida tampoco ha contribuido, según el Inegi, a reducir la incidencia de robos, asaltos, extorsiones, robos de vehículos, fraudes, secuestros y asesinatos.

Los morelenses han tenido que cambiar sus hábitos: ya no salen de noche ni dejan que los menores lo hagan; no usan joyas en público y evitan llevar consigo mucho dinero en efectivo y tarjetas de crédito o débito.

Además, han cambiado puertas y cerraduras, y muchos han instalado alarmas, contratado seguros o vigilancia privada para su calle o colonia. Otros han adqirido armas de fuego o se han cambiado de casa.

Tampoco ha funcionado el nombramiento de ex militares en la Secretaría de Seguridad Pública del estado y en la de Cuernavaca, que supuestamente mejoraría la coordinación con las fuerzas castrenses en el combate contra el crimen organizado.

Esta lucha, según Javier Sicilia, poeta y representante del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad, debe replantearse porque sólo ha dejado miles de muertos, entre ellos jóvenes inocentes como su hijo.

Sicilia ha convocado a los mexicanos a un pacto nacional basado la promoción de la seguridad, el trabajo, la educación y la cultura, a fin de de reconstruir el tejido social en el país.

Jorge Carrillo Olea, especialista en seguridad nacional e inteligencia y ex gobernador de Morelos, dijo que la lucha contra el narcotráfico ha contribuido a empeorar la violencia y la inseguridad, pese a lo cual las autoridades se niegan a cambiar de estrategia.

Carrillo lamentó que haya cada vez más delitos en el estado y atribuyó esta situación a que los encargados de la seguridad y la justicia en Morelos no tienen el perfil necesario ni conocen su función. Tenemos un desastre total, no nada más en seguridad pública, sino en toda la administración.

Según la encuesta, los morelenses perciben que la inseguridad ha aumentado por la falta de empleo, la corrupción, el narcotráfico, la pobreza, un sistema de justicia deficiente y la falta de castigo a los delincuentes.