Con el propósito de brindar mayores elementos a los gobiernos y las organizaciones sociales para que formulen mejor sus propuestas o políticas públicas, el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) presentó ayer la base de datos México Estatal, en la cual se reúne en un solo sitio información de diversas fuentes oficiales.

Dicho proyecto, coordinado por especialistas del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), se desarrolló durante los recientes tres años y se divide en seis áreas temáticas: salud, educación, seguridad ciudadana, fomento económico, calidad de gobierno y rendición de cuentas.

Uno de los principales objetivos de esta base de datos y página web (disponible en mexicoestatal.cide.edu), explicó en conferencia de prensa una de sus coordinadoras, Alejandra Ríos Cázares, es reunir información proveniente de diversas instituciones en un solo núcleo, y de esa manera facilitar su consulta y uso para sustentar políticas públicas.

Una de las sorpresas más negativas en la elaboración de este índice, afirmó, es el hecho de descubrir el alto nivel de dispersión de los datos oficiales, así como la vaguedad de la rendición de cuentas de los funcionarios y el escaso nivel de coordinación entre los tres niveles de gobierno, cuando parte de la obligación de las autoridades es informar, explicar y justificar todo su trabajo.

Por su parte, Guillermo Cejudo, también coordinador del proyecto e integrante de la división de administración pública del CIDE, aclaró que, a pesar de los miles de datos y variantes contenidos en México Estatal, hay información que no fue posible recabar porque las instituciones no la facilitaron, aunque igualmente destacó la utilidad que puede tener esta herramienta para que los tomadores de decisiones concreten su trabajo de manera mucho más sustentada.

Sergio López, director de promoción y vinculación con la sociedad organizada del Instituto Federal de Acceso a la Información y Protección de Datos (Ifai), resaltó que tanto los gobiernos como las organizaciones civiles independientes pueden utilizar este instrumento para argumentar mejor sus propuestas o resolver problemas de la comunidad.

La intención, dijo, es cambiar la lógica de trabajo del Estado y demostrar que ningún tema es responsabilidad exclusiva de especialistas, sino de todos los ciudadanos, a través de la transparencia, la rendición de cuentas y la participación informada.