Senadores del PRI trataron de justificar la pifia de su precandidato presidencial, Enrique Peña Nieto, quien no fue capaz de enumerar tres libros que hubiese leído y confundió al autor de una obra. En tanto, panistas, perredistas y petistas coincidieron en que el hecho pinta al virtual abanderado del tricolor como un personaje vacío, sin cultura, que ha sido encumbrado por la televisión, para llegar a la Presidencia de la República.

Mientras en la Cámara de Diputados los priístas rechazaron hablar sobre la incapacidad de su precandidato presidencial para citar tres libros, legisladores del PVEM –que irá en alianza con el PRI en el proceso electoral de 2012– sólo atinaron a señalar que el ex gobernador del estado de México obtuvo su licenciatura en derecho con altas calificaciones.

Aun cuando entre los políticos el debate sobre la equivocación de Peña Nieto en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara parece perder intensidad, en las redes sociales la discusión continúa.

El hashtag #libreriapenanieto tenía hasta ayer aproximadamente 60 mil menciones. No obstante, no apareció en la lista de Trending Topics (temas más comentados del día), lo que causó indignación entre los tuiteros, como señaló el diputado Javier Corral, del PAN, en su cuenta de esa red social.

El senador priísta Francisco Labastida Ochoa dijo que el error de su precandidato no es de mayor importancia y se debió al cansancio, ya que Peña Nieto está durmiendo poco, porque la mayor parte de las negociaciones políticas en el PRI las está llevando él.

La senadora María de los Ángeles Moreno, también del PRI, consideró que es un incidente sin importancia, irrelevante, porque no todo mundo tiene memoria para acordarse de los libros que ha leído y los autores. Además, dijo, ya rectificó y pidió disculpas por la frase mal utilizada que repitió su hija en su cuenta de Twitter.

Por otra parte, el petista Alejandro González Yáñez subrayó: “Hay que pedirle a Peña Nieto menos look y más book, es decir, menos copete y más libros”.

Mientras, el panista Juan Bueno Torio comentó que por lo menos debió acordarse de alguna lectura infantil, como Los tres cochinitos. Sin embargo, sostuvo que el dislate de su precandidato Ernesto Cordero, que llamó Isabel a la novelista colombiana Laura Restrepo, fue mucho menor que el de Peña Nieto, quien se equivocó en todo.

La panista Beatriz Zavala manifestó que es preocupante que quienes aspiren a presidir el país no cuenten con una formación cultural y literaria sólida. Destacó que, desafortunadamente, vivimos épocas en que las apariencias cuentan mucho y en lugar de proyectarse como jefes de Estado se proyectan como estrellas de cine.

El perredista Carlos Sotelo recalcó que tanto Peña Nieto como Cordero han mostrado su incultura y falta de ideas.

En la Cámara de Diputados, los legisladores priístas una vez más rechazaron abordar el tema. César Augusto Santiago exclamó: ¡De eso no voy a hablar! Y al insistirle, respondió: “Ya lo dije en español, pero si no entienden, también en inglés. I don’t speak about it!”

–¿Ni para defender a su precandidato presidencial?

–Yo no caigo en provocaciones –señaló.

El presidente de la Comisión de la Función Pública, Pablo Escudero Morales, del PVEM, expuso que entre los políticos hay ejemplos recientes de personajes que han citado mal a los autores y sus obras. El ejemplo más depurado en el PAN es el de Vicente Fox, pero ¿y Ernesto Cordero?

El legislador expuso que la Universidad Panamericana, de la que Peña Nieto es egresado, es una institución privada de alto nivel académico y se necesita ser muy dedicado, estar muchas horas en clase y cumpliendo con las tareas. Él pasó todas sus materias y para ello tuvo que leer al menos 20 libros como estudiante.

Por su parte, el coordinador de los diputados del PT, Pedro Vázquez, expuso que cuando avance el proceso electoral de 2012 las deficiencias culturales y académicas de Peña Nieto se acentuarán. La campaña y los eventuales debates entre candidatos requieren propuestas de fondo. Su dislate en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara nos ofrece un esbozo de su bajo nivel cultural, pero también sobre su desconocimiento de la historia nacional, dijo.