En México hay entrenadores con talento que son desaprovechados, y prefieren contratar a los extranjeros. Los resultados se están dando y es cuestión de que nos miren, tomen en cuenta y apoyen, señaló Miguel Flores, el técnico que encaminó a Alejandra Valencia a convertirse en la gran revelación del tiro con arco mucho antes de que ganara dos medallas de oro en los Juegos Panamericanos de Guadalajara.

Tras pasar la euforia y con los premios económicos que en breve recibirán los medallistas continentales, Flores espera que las autoridades deportivas respalden a los entrenadores del país con mejores salarios y capacitación.

“He recibido halagos y promesas (en Sonora, su entidad) de mejoras. Sabemos que a final de año los presupuestos están apretados, y más en los estados.

Somos tres entrenadores que trabajamos con 90 arqueros y hay una buena camada, expuso el estratega, quien no se separa de su mejor alumna en los momentos de más tensión y concentración cada vez que la arquera de 17 años dispara las flechas.

Flores apuntó que al margen de los resultados logrados por su pupila, espera que haya más recursos para el programa del próximo año, con la mente puesta en el preolímpico continental de Colombia y Londres.

Al preparador no le sorprenden los resultados de Valencia. Los veía venir y en verdad fue buen año para los dos en Copas del Mundo, porque estando en las categorías juvenil y cadete se ganó el lugar en la selección mayor con Aída Román y Mariana Avitia, quienes tienen más experiencia.

Ubicada en el lugar 12 mundial, la sonorense se distingue por ser muy disciplinada y con gran talento, recalcó Flores, quien se alista para el campeonato del orbe bajo techo, en febrero, a realizarse en Las Vegas.