Lunes 5 de diciembre de 2011, p. 41
Centenares de fieles recorren el costado de autopistas con el único propósito de visitar a la virgen de Guadalupe, en el cerro del Tepeyac.
Desde hace tres días un contingente procedente de Chachahuantla, localidad ubicada en los límites de Puebla con Hidalgo, marcha rumbo al Distrito Federal. En el camino se han ido sumando campesinos, taxistas, comerciantes y jóvenes.
La mayoría de los fieles de esta peregrinación son hombres, como Juan Manuel Espinoza, quien desde hace 50 años sigue esta tradición que comienza en Puebla.
Este año caminará poco más de cien kilómetros hasta el templo mariano sólo para cumplir una promesa, y como siempre, pedir a la Virgen que proteja a mis seres queridos
, comenta.
Su hijo, Juan Manuel, de 17 años de edad y empleado en una tienda de ropa, comenta que hay motivos muy personales por los cuales ir hasta allá, hacer el sacrificio, caminar toda la ruta; no todos los jóvenes están dispuestos a hacer este esfuerzo
.