En el país, alrededor de 40 por ciento de los casinos estarían en situación irregular, por lo que es necesario seguir con la restructuración de este sector, señaló Juan Marcos Gutiérrez, hasta ayer subsecretario de Gobierno de la Secretaría de Gobernación (SG).

En el proceso de entrega y recepción del cargo a Obdulio Ávila, quien este jueves encabezó la primera reunión con los directores adscritos a esta subsecretaría, Gutiérrez indicó que no se podrá avanzar en tanto la dirección general adjunta de Juegos y Sorteos permanezca con la misma estructura y escaso personal.

El ex funcionario, quien decidió retirarse de la dependencia donde colaboró con su gran amigo, compañero de estudios y de carrera política, Francisco Blake, advirtió que no debe demonizarse a los casinos.

Según mis cálculos, más de 60 por ciento de los establecimientos dependen de permisionarios que han observado razonablemente la ley, dijo el ex funcionario.

–Pero 40 por ciento de irregulares es mucho, ¿no le parece? –se le cuestionó.

–Ese 40 por ciento, creo que después de las acciones que se tomaron de septiembre para acá debió haber entendido, o entendió, que debe jugar dentro de las reglas.

Gutiérrez señaló lo anterior luego que el área que tenía a su cargo debió hacer una revisión amplia de los expedientes de permisionarios, debido a que se reveló una cadena de irregularidades, tras el incendio, en agosto pasado, del casino Royale de Monterrey, donde murieron 52 personas.

En pleno proceso de entrega de documentos a Obdulio Ávila –quien hasta el miércoles pasado fue dirigente del PAN en el Distrito Federal–, dijo que hay un contexto diferente tras la develación de una línea de permisos irregulares y paralelos de autorizaciones ilegales de habilidad y destreza que permiten o permitían a muchos empresarios eludir el visto bueno de Gobernación.

Diversos pendientes

El ex funcionario deja también otros asuntos en ciernes en la subsecretaría, no sólo para encaminar el proyecto de reforma a la Ley de Juegos y Sorteos, sino también otros en materia de gobernabilidad.

Sobre esto último destaca la necesidad de fortalecer la agenda de entendimiento político con las organizaciones civiles que exigen un cambio en la estrategia de seguridad, como el Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad.

Además, la atención a focos rojos que, en la clasificación de la dependencia, constituyen conflictos sociales, como el problema entre Oaxaca y Chiapas por los límites en la región de los Chimalapas.

Ese lo dejamos bien encaminado, pero se requiere vigilarlo de cerca, estarlo atendiendo día a día, comentó.

Otro punto en la agenda de gobernabilidad es la respuesta a las demandas del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME)

En el último día de gestión como subsecretario, entregó al SME una propuesta gubernamental que de inmediato fue calificada de inviable por los electricistas.

Ante la salida de Gutiérrez, el dirigente del SME, Martín Esparza, reveló este jueves: “Recibimos una propuesta, que no es otra cosa que una provocación del gobierno hacia nuestro sindicato.

El mes pasado entregamos una propuesta seria, con bases técnicas y económicas para hacer posible la reinstalación de los 16 mil 599 miembros del SME, quienes tras 25 meses continuamos en resistencia, por lo que exigimos de las nuevas autoridades de Gobernación un diálogo serio, respetuoso en el que respondan acerca del documento que les entregamos, dijo Esparza.