Miércoles 23 de noviembre de 2011, p. 24
El gobierno debe sacar a Petróleos Mexicanos (Pemex) de los controles derivados del presupuesto gubernamental y descargarla
fiscalmente de entre 250 mil y 300 mil millones de pesos anuales, para alcanzar niveles de inversión a los de petroleras similares, como Petrobras, recomendaron el consejero ciudadano de la paraestatal Fluvio Ruiz, y el asesor del consejo de administración, Carlos Huerta.
En un análisis comparativo entre Pemex y Petrobras, cuyo modelo de negocio se ha propuesto para sacar adelante a la mexicana, ambos especialistas identificaron un decálogo de acciones implementado por la brasileña y sobre las cuales se basa su éxito y posición mundial.
Indicaron que si bien el monto de inversión es importante, no se puede extrapolar una sola acción para adaptarla a Pemex, y sería necesario aplicar el modelo completo para aspirar a tener un éxito similar.
Acciones de éxito
Ambos especialistas identificaron un decálogo de acciones de éxito
aplicadas en Petrobras, que comprenden la intervención del Estado en el diseño de una política industrial activa orientada a la sustitución de importaciones en materia energética, en un contexto de competencia entre proveedores nacionales y extranjeros; planificación estratégica plasmada en un plan de negocios quinquenal; dejar fuera del presupuesto a la petrolera y contar con un sistema fiscal no confiscatorio de los recursos que genera; una robusta legislación que otorgue amplias facultades de revisión, fiscalización y sanción a sus órganos reguladores para mantener el control directo de sus recursos naturales pese al sistema de concesiones o contratos con empresas extranjeras, y otros puntos.
De manera relevante mencionan que la inversión sostenida por la brasileña es una de las piezas claves del rompecabezas de un Petrobras exitoso
. La diferencia sustancial
, explican, son 100 mil millones de dólares para los próximos cinco años, ya que Petrobras planea invertir 225 mil millones, y Pemex sólo 125 mil millones. Aclaran que eso no es todo, pues la forma en cómo se distribuyen los recursos también marca una diferencia sustancial
, afirman.