Los recursos públicos que se destinarán en 2012 al desarrollo de la ciencia y la tecnología en México no han tenido ningún impacto para incrementar el porcentaje del producto interno bruto (PIB) que se canaliza al sector, señaló Enrique Villa Rivera, director general del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), quien estimó que al cierre de este año la inversión pública alcanzará sólo 0.46 por ciento.

En conferencia de prensa, tras presentar los resultados del Fondo de Cooperación Internacional en Ciencia y Tecnología (Foncicyt), suscrito con la Unión Europea en 2007 y que concluyó este año, informó que la Cámara de Diputados tampoco aprobó una reasignación presupuestal por mil 500 millones de pesos que se destinaría para infraestructura en centros de investigación y universidades públicas.

Durante la entrega de reconocimientos a los 34 proyectos de investigación que participaron en el Foncicyt, con un total de 20 millones de euros, enfatizó que el ramo 38 del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2012, del cual depende el organismo que encabeza, tendrá poco más de 21 mil millones de pesos en recursos para el año próximo.

Sin embargo, destacó que ya nos hemos puesto en contacto con la Secretaría de Educación Pública (SEP) para ver cómo podemos mejorar los recursos, pues también señaló que hubo crecimiento cero en los fondos SEP-Conacyt destinados a ciencia básica.

El funcionario reiteró que en lo que va de la presente administación los recursos que se destinan al Conacyt pasaron de 7 mil a 21 mil millones de pesos, aunque reconoció que es necesario ir más aprisa en la inversión de fondos públicos si México quiere impulsar un desarrollo sostenido del país, tomando como base el desarrollo científico y tecnológico.

Villa Rivera también criticó la falta de apoyo de la iniciativa privada para incrementar su inversión en el sector, por lo que consideró que en este campo también tenemos mucho por hacer, pues no han invertido de forma suficiente en ciencia ni para generar tecnología endógena con el apoyo de científicos mexicanos.

Al respecto, Stephan Vavrik, jefe adjunto de delegación de la Unión Europea en México, destacó que, pese a la crisis que enfrenta la región, se ha tenido claro que invertir en ciencia y tecnología impulsa el desarrollo, pues por cada euro invertido en el sector, comprobamos que en un par de años se obtienen 2.5 euros en innovación, es decir, tiene un efecto multiplicador.

Sin embargo, autoridades del sector destacaron que en nuestro país no se quiere entender que sin ciencia ni tecnología nunca podremos impulsar un verdadero desarrollo nacional.

René Asomoza, director del Centro de Investigaciones y Estudios Avanzados (Cinvestav) del IPN, destacó que los recursos asignados a esa institución en 2012 permitirán salir adelante, pero sin mayor crecimiento, pues los diputados no aprobaron un solo peso para el incremento presupuestal.

Juan Pedro Laclette, presidente del Foro Consultivo, Científico y Tecnológico y ex presidente de la Academia Mexicana de Ciencias, afirmó que el sector carece de una cabeza que oriente un rumbo claro, pues el Conacyt agrupa a una parte de la comunidad científica, pero no a toda, a lo que se suma que no existe una verdadera política de Estado en esta materia.

Virginia García Acosta, directora del Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (Ciesas), agregó que para 2012 contará con un presupuesto de poco más de 200 millones de pesos, con lo que tendremos que salir adelante, aunque hubo recortes en rubros destinados a la elaboración de libros y pago de viáticos, lo que nos afecta.

Agregó que año con año los centros de investigación que dependen del Conacyt deben enfrentar condiciones precarias de financiamiento, pues no se ha consolidado un sistema nacional de centros-Conacyt, lo que impide que nos tomen en cuenta para crear redes de investigación, así como para otorgar mayores recursos financieros.