Exigen la firma de los líderes de los partidos mayoritarios griegos
Martes 22 de noviembre de 2011, p. 23
Bruselas, 21 de noviembre. El primer ministro griego, Lucas Papademos, evitó dar garantías escritas a la Unión Europea (UE) y al Fondo Monetario Internacional (FMI) sobre la aplicación de medidas recesivas en la economía de su país, a cambio de líneas de crédito por 248 mil millones de dólares, aduciendo cuestiones de soberanía nacional.
Papademos comenzó hoy en Bruselas una ronda de entrevistas con el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, quien recibió al jefe de gobierno de Grecia con la advertencia de que el financiamiento a la debilitada economía de la nación mediterránea debe quedar por escrito, con las firmas de las fuerzas políticas mayoritarias en el Parlamento, es decir, las derechistas Nueva Democracia, Unión Popular Ortodoxa y el Partido Socialista.
Para que la UE y el FMI apoyen a Grecia es necesario tener la seguridad de que el esfuerzo se mantendrá a largo plazo, que no concierne sólo al futuro inmediato y a este gobierno, sino también a gobiernos futuros
, dijo Barroso.
Un compromiso escrito es necesario para eliminar la incertidumbre y las ambigüedades sobre las medidas que los partidos puedan tomar en el futuro
, dijo Papademos. Sin embargo, aclaró que la decisión de rubricar las metas de la política económica corresponde a los líderes de los principales partidos políticos.
En la crisis financiera griega de los últimos cuatro años, sólo el partido Nueva Democracia había señalado su rechazo a respaldar los planes recesivos y su negativa a firmar documentos respecto de la política económica, con el argumento de que eso abriría la puerta a la intervención extranjera.