Acapulco, 21 de noviembre. Una de las actrices clave en la educación sentimental de tres generaciones, Arcelia Ramírez, desde La mujer de Benjamín, de Carlos Carrera, hasta Las razones del corazón, trabajo más reciente de Arturo Ripstein, presentó su nueva película, Los fabulosos 7, dentro del séptimo Festival Internacional de Cine Acapulco 2011. En entrevista con La Jornada, mientras lucha por retirar el cabello que la brisa lleva hasta su rostro, considera: Siento que he tenido una evolución en el sentido del gozo, del placer y la pasión que me da hacer mi trabajo, como siempre lo he hecho. Espero que vengan más desafíos actorales que me hagan enfrentarme a mis límites para crecer; porque creo que aún soy una actriz en formación.

De sus seis recientes años de vida, Arcelia Ramírez, conteniendo su pelo ante el embate del viento, dice: “Estuve viviendo entre México y París. Cuando estaba acá hice trabajos como El viaje de Theo y Cómo no te voy a querer, entre otros, pero eran personajes chicos; además, hice una serie de televisión con Eugenio Derbez; pero el ritmo de trabajo cambió mucho, porque estaba construyendo mi proyecto de familia: me casé y tuve dos niñas. Los fabulosos 7 es un trabajo que realicé hace un motón de tiempo y qué bueno que justo a mi regreso a vivir de fijo en México se estrena en Acapulco, y qué bueno que Los razones del corazón también haya abierto la Muestra de la Cineteca Nacional, en la cual hago dos personajes protagónicos”.

Evolución

Mientras la brisa marina se intensificaba y alborotaba el cabello de Arcelia, la actriz dijo: “Es curioso que hace 10 años hice con Risptein Así es la vida, que fue un desafío actoral enorme, y como los los actores somos muy inseguros, me llevaba el personaje a mi casa. Ahora me di cuenta de que no tienes que hacer eso para acceder a una ficción, no es lo más sano, porque, como el personaje, yo también estaba en el abismo total. Ahora, 10 años después, hice Las razones del corazón, con un personaje igual de difícil, y en una situación igual de intensa, pero ahora me desmaquillaba, me deshacía del personaje para irme a mi casa feliz a dar de comer a mis niñas... creo que ahí hubo una evolución actoral”.

De su ir y venir de París a México, y aún luchando por mantener la cabellera en su lugar, Arcelia Ramírez da su percepción del cine mexicano: “Desde hace unos años la producción anual se ha reactivado, se están haciendo más películas, que proporcionalmente es importante, porque antes de cinco o 10 que se producían dos o tres eran buenas; ahora si se hacen 60, habrá unas 10 buenas... Considero que el cine mexicano siempre ha tenido películas suficientemente poderosas como para estar en el lugar que tiene en el mundo y el recorrido que hace en festivales internacionales, cosechando premios independientemente del número de películas que se hagan, siempre hay una fuerza y una vitalidad en el cine mexicano, con historias tremendas, contundentes, y más ahora, con toda una generación de cineastas nuevos que están ofreciendo propuestas más interesantes.

Arcelia Ramírez en el encuentro fílmicoFoto Paulo Vidales

Por otro lado, creo que otorgar dinero a la producción mediante el estímulo fiscal, consignado en el artículo 226, no se ha hecho con el suficiente rigor en el caso de algunas películas; los criterios y objetivos para hacer cierto tipo de cintas no han estado claros desde un principio. Debe haber un filtro de calidad para saber qué guiones se van a apoyar, independientemente de que los empresarios quieran impulsar a tal o cual película; para que sea un tamiz y no se filme cualquier cosa y que ese estímulo lo sigan destinando al cine y no a otras áreas sociales, también prioritarias; ya se sabe que la cultura de un país es fundamental, pero siempre que hay recortes presupuestarios la principal sacrificada es el área cultural, lo cual me parece un error tremendo, pero eso ya es otro tema... Sin embargo, para apoyar al cine éste debe tener estética visual, ser serio, profundo. Debe haber rigor, no que se realice únicamente por el interés del empresario de no darle su dinero al fisco, sino también ofrecer una buena producción, que se eleve la calidad para acabar con el escepticismo del público.

Amor, la esencia

Al menguar la brisa, Arcelia Ramírez por fin logra aplacar su cabello, y entonces habla específicamente sobre la cinta, en la que comparte créditos con Ausencio, Cruz, Odiseo Bichir, José Ángel Bichir y Jimena Sariñana, bajo la dirección de Fernando Sariñana, dice: “Los fabulosos 7 tiene razón en señalar que lo importante somos nosotros, porque después de todo lo que viven los miembros de la familia de la película, después de perder su casa, su salón de fiestas, de quedarse sin patrimonio, se tienen ellos mismos, mientras el hijo lucha por lo que quiere. Esta es la parte esencial de la cinta, independientemente de ser personas llenas de contradicciones y que tienen que enfrentar la adversidad, finalmente se mantienen unidos por el amor”.

Se tiene previsto estrenar Los fabulosos 7 durante el primer trimestre del próximo año.