Petróleos Mexicanos (Pemex) no cuenta con la capacidad de ejecución, recursos financieros ni con el marco fiscal y la reglamentación para empezar el desarrollo de la explotación de gas shale, aseguró Carlos Morales Gil, director general de Pemex Exploración y Producción (PEP).

Sin embargo, el funcionario recordó que otros países que realizan una intensiva explotación de este energético tampoco los tenían, por lo que exhortó a iniciar trabajos para caracterizar geológicamente los prospectos y luego entrar al desarrollo masivo. Tenemos que tomar esta decisión con rapidez, afirmó.

Morales propuso diseñar un marco legal y desarrollar en paralelo los modelos comerciales para atraer inversiones, pero sin comprometer la propiedad del gas shale. Indicó que con el actual régimen fiscal no es rentable el desarrollo de esta industria.

El gas de lutitas o shale es gas natural que se encuentra en yacimientos de rocas denominadas lutitas o arcilla, localizados a mayor profundidad que los pozos convencionales.

Al participar en el foro Perspectivas nacionales e internacionales de la industria de shale gas y su contribución al desarrollo del sector energético, Morales Gil detalló que para la explotación de ese gas se requieren unos 100 mil millones de pesos anuales, por lo que para perforar en la próxima década más de 65 mil pozos se necesitan unos 4 billones de pesos, con costos de 5 millones de dólares por pozo.

Según las estimaciones del Departamento de Energía de Estados Unidos, México ocupa el cuarto lugar mundial por sus recursos potenciales de gas shale, con 680 billones de pies cúbicos.

Al respecto, Jordy Herrera, secretario de Energía, consideró que la explotación de gas shale en México podría atraer inversiones de entre 7 y 10 mil millones de dólares anuales. Además, durante los próximos 15 años podrían generarse hasta 1.5 millones de empleos directos e indirectos en las actividades de exploración, explotación y a lo largo de la cadena que se detona a través del gas natural.

Adicionalmente se reducirían las importaciones de gas natural, fortaleciendo la seguridad energética del país y reduciendo la dependencia energética del exterior. Aseguró que las reservas de gas en México pueden elevarse de 24 a 60 años.

Felipe de Jesús Cantú, presidente de la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados, planteó la posibilidad de crear una empresa subsidiaria de Pemex para la explotación del gas shale. Además, en el tema debe prevalecer la obligatoriedad del contenido nacional para desarrollar esta industria, conjuntamente con la sociedad.

Otro punto, dijo el diputado, es buscar el equilibrio ambiental, pero eso no tiene que ser la excusa para detener el desarrollo.

Por su parte, Juan Carlos Zepeda, presidente de la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH), señaló que con las restricciones presupuestarias de Pemex se va a dificultar el desarrollo del gas shale, por lo que el reto será abatir costos. Actualmente un pozo tiene un costo de entre 6 y 8 millones de dólares.

En la regulación para explotar gas shale debe intervenir la Semarnat y la CNH, sobre todo para analizar el tema de las descargas y el reciclaje de agua.

Por su parte, Mark L. Eisenhower, vicepresidente de la operadora Pace Global, advirtió al participar en el foro que un tema fundamental es el reciclaje de agua, ya que la explotación de gas shale consume enormes cantidades de agua dulce, por lo que se debe buscar el equilibrio con las comunidades. También se tiene que avanzar en la regulación, que debe de ser más severa. En México se debe pensar cómo capturar el agua, cómo tratarla de manera económica, sostuvo.