Elementos de la policía ministerial del estado de Sinaloa y personal del Ejército mexicano detuvieron a 32 agentes y mandos de la policía municipal de Ahome, y a Horacio Reyes, secretario de seguridad pública de esa localidad, en un operativo realizado este lunes en la ciudad de Los Mochis.

Zenén Xóchihua, alcalde de Ahome, informó que Jesús Antonio Aguilar Íñiguez y el general Moisés García Melo, director de la policía ministerial y comandante de la novena Zona Militar, respectivamente, convocaron a los agentes a una reunión de coordinación, y una vez en el lugar los desarmaron y detuvieron. El sector fue rodeado por ministeriales y personal castrense.

Alrededor de las 14 horas, los detenidos fueron trasladados a Culiacán resguardados por un convoy de militares y agentes ministeriales, para ponerlos a disposición de las autoridades y determinar su situación legal. Según versiones no oficiales los policías fueron detenidos por su presunta relación con grupos del crimen organizado, específicamente zetas y células de los Beltrán Leyva, que operan en el norte de la entidad.

En Chihuahua, los cuerpos de seis albañiles, uno de ellos decapitado y otro con las manos mutiladas, fueron localizados en el municipio de Bocoyna, en la sierra Tarahumara. Estas muertes son parte de una jornada violenta en el estado de Chihuahua, durante la cual murieron en diversos incidentes 13 personas, dos de ellas mujeres.

Mientras, la familia del director de seguridad pública de Castaños, Coahuila, Javier Hernández, confirmó ayer que que el jefe policiaco y sus hermanos Cristian y César Joel estaban desaparecidos desde el viernes anterior. Actualmente la fiscalía coahuilense busca determinar si tres cadáveres calcinados, hallados dentro un automóvil que se encontró incendiado el domingo, corresponden a Hernández y sus consanguíneos.

En Apodaca, Nuevo León, tres personas –entre ellos una mujer– que viajaban en una camioneta fueron acribilladas por un grupo armado. También resultaron heridas dos mujeres y un menor de edad. Otro menor que se encontraba en el vehículo resultó ileso. El conductor recibió cinco impactos de bala de grueso calibre y en el asiento del copiloto quedó muerta una mujer. A unos cien metros del vehículo se localizó el cuerpo de un joven de alrededor de 20 años, quien no estaba armado.

Las víctimas trataron de escapar en reversa y chocaron contra un protector vial. Tras el impacto, los agresores dispararon a la cabina de la camioneta. Tres personas más de la misma familia, que también estaban en la unidad, resultaron lesionadas.