La victoria del PRI en las elecciones en Michoacán consolida la ruta del tricolor rumbo a 2012, consideró el aspirante de ese partido a la Presidencia Enrique Peña Nieto, quien sostuvo que el triunfo en esa entidad arropa la condición que a escala nacional ha logrado el priísmo por el respaldo ciudadano. Triunfalista tras el resultado, el ex gobernador mexiquense dijo que hoy el PRI se prepara para competir, para ganar y para gobernar en la democracia.

Por su parte, el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, se manifestó por que en Michoacán impere la ley para que el estado pueda pronto ponerse a trabajar. Sobre quién ganó los comicios, dijo que habrá que esperar hasta el recuento, pues la democracia es voto por voto.

Los resultados de las elecciones michoacanas produjeron reacciones encontradas, entre ellas las que a título personal ofreció el coordinador del Diálogo para la Reconstrucción de México (Dia), Manuel Camacho Solís, quien se pronunció por que el PRD reconozca los resultados de las elecciones, pues será sumamente complicado que las impugnaciones prosperen en el ámbito judicial.

Entre los legisladores priístas hubo un ánimo triunfalista tras la victoria de Fausto Vallejo, anunciada por el PREP. A decir del senador Francisco Arroyo Vieyra, el triunfo del tricolor es un premio de la sociedad a su trayectoria y refleja que los michoacanos estaban hartos de la inseguridad, pues 40 por ciento del territorio no está en poder del gobierno estatal.

No les alcanzó el dinero

A los panistas no les alcanzaron las carretadas de dinero que ese partido llevó a Michoacán, y eso nos dice que la sociedad, cuando se decide a cambiar, lo hace por el que considera que es el mejor, y que no está dispuesta a vender su voto, agregó.

Carlos Jiménez Macías, también senador del PRI, sostuvo que ganaron pese a la campaña de Estado que emprendió el gobierno federal, y también una campaña del gobierno estatal contra el aspirante del Revolucionario Institucional. Señaló que es un golpe al PRD, porque pierde un bastión emblemático. Les pega y muy fuerte para la elección de 2012.

El perredista Tomás Torres manifestó que haber perdido la gubernatura de Michoacán es un descalabro para el sol azteca y para la izquierda. Debe hacerse una crítica y un análisis internos y se debe admitir que hay responsables, dijo.

Destacó en entrevista que en la elección de gobernador en Michoacán hubo muchos recursos del gobierno federal en apoyo de su candidata (Luisa María Calderón), pero al gobierno estatal se le cerró la llave, no le dieron las participaciones que le correspondían a la entidad, pero con todo ese respaldo que el Ejecutivo destinó a su partido no le fue suficiente para ganar.

Mientras, el senador panista Rubén Camarillo dijo que esperarán los resultados el próximo miércoles, pero demandó que se investigue la participación del crimen organizado y si hubo algún partido que dio entrada a esa participación. Se tiene que investigar cualquier trato con el crimen organizado, porque eso es traición a la patria.

En tanto, en la Cámara de Diputados el coordinador del PRD, Armando Ríos Piter, consideró que los resultados en Michoacán no apuntan a la definición del resultado de la elección presidencial. Para el legislador, los priístas ya nadan con bombo y platillo, pero habrá que hacerles una primera pregunta: si les parece suficiente este triunfo para dejar a un presidente de su partido (Humberto Moreira), “identificado con la gran corrupción en el estado de Coahuila.

Si ellos quieren seguir festejando y no atienden el reclamo de distintos sectores, que lo sigan haciendo, porque será un error, y esa soberbia será la causa de su principal derrota.

–¿Pero fue derrotado el PRD en Michoacán?

–Nosotros tenemos que reflexionar qué fue lo que pasó en Michoacán. El triunfo electoral de un estado no define de ninguna manera la elección presidencial. Ésta tendrá condiciones sui generis, específicas, y todos estamos en la competencia –concluyó Ríos Piter.

A su vez, Margarita Liborio, representante del PRI, atribuyó el triunfo de Fausto Vallejo al hartazgo que han generado entre la ciudadanía las políticas en seguridad, desarrollo social y economía de Felipe Calderón, manifestándose la calificación reprobatoria en contra de éste por la urgente necesidad de impulsar la paz y el desarrollo.