Rodolfo Tuirán, subsecretario de Educación Superior de la Secretaría de Educación Pública (SEP), reconoció la labor que desempeña la Iglesia católica en este rubro, a través de sus escuelas y universidades, pero no nos estuvo echando alabanzas, sólo reconoció que cooperamos en la educación formal en el porcentaje, muy pequeño, que la Iglesia participa en este proceso formativo de los mexicanos, señaló Manuel Corral Martín, asesor de la Presidencia de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM).

En entrevista, el sacerdote indicó que en la exposición privada que hizo el funcionario a los obispos reunidos en la 92 asamblea plenaria de la CEM, titulada Diagnóstico de la educación en México, Tuirán también habló sobre la reforma educativa que se ha llevado a cabo en algunos niveles y valores universales.

El subsecretario habló de la pertinencia de incentivar los valores, desde la perspectiva humana, ante las nuevas realidades; comentó sobre los valores que rigen a la sociedad y darles importancia, dedicarles tiempo especial a esos temas que se dejaron de lado en tiempos pasados; se refirió a valores universales, que muchos también son valores cristianos, pero no detalló, sólo dijo que se les debe dar prioridad.

Sobre la reforma educativa, Corral manifestó que el subsecretario les subrayó que la intención es que ésta lleve a México a los niveles educativos internacionales; dijo que las reformas son para hacer de México un país competitivo.

Durante poco más de una hora 20 minutos, el funcionario dio un balance de la educación a los 120 obispos reunidos en asamblea, y en ese tiempo no habló del sindicato (Nacional de Trabajadores de la Educación) porque el tema es la situacion actual de la educación, y ya lo dijeron ayer (el martes) los obispos: el sindicato no es el problema; no es un sindicato ni una persona ni una institución la responsable de cómo está la educación, sino una sociedad alejada de los procesos educativos y del interés por la educación.

Agregó que para los obispos la reunión fue muy positiva.

Sobre educación, el obispo de San Cristóbal de las Casas, Felipe Arizmendi Esquivel, indicó que si se quiere que en el país no haya violencia, inseguridad, consumo y tráfico de drogas, asesinatos, extorsiones y secuestros, la solución es edúcate y educa, y agregó que se debe enriquecer la educación formal escolar con una mayor apertura a la formación cívica, ética, social, familiar y trascendente.

Destacó que se requiere de educación para que haya justicia y armonía social, equidad y paz, respeto, amor y esperanza.

La CEM indicó que Tuirán también abordó temas como la matrícula educativa en el nivel nacional; la ampliación de oportunidades para brindar y continuar con los estudios hasta concluir la educación superior; los programas de becas para disminuir los casos de deserción; la desigualdad del ámbito educativo; la calidad en la educación y las implementaciones realizadas para mejorar el nivel y los servicios educativos, tanto en instalaciones, equipamiento y contenidos.

También habló sobre el desempeño de los alumnos y la participación de los padres de familia en la educación formal de sus hijos; valuación educativa; énfasis en la lectura; creación de un nuevo mecanismo para detectar las carencias de la formación y la escuela como centro de enseñanza, valores y convivencia.