Santiago, 9 de noviembre. Unos 30 mil estudiantes y profesores marcharon hoy por el puerto de Valparaíso hasta las cercanías del Congreso Nacional, al continuar su exigencia de una educación pública gratuita y de calidad, así como para presionar al Legislativo para que considere sus planteamientos de un incremento al presupuesto para el sector.

La protesta se desarrolló pacíficamente por el centro de la ciudad, y sólo al final se desataron disturbios cuando grupos de manifestantes, algunos enmascarados, intentaron sobrepasar la valla policiaca para llegar hasta el Congreso, que estaba a unas tres cuadras. Los agentes lo impidieron lanzando gas lacrimógeno y chorros de agua y hubo decenas de detenidos.

La dirigente estudiantil Camila Vallejo criticó la negativa de las autoridades de permitir que la marcha culminara frente al Congreso, al señalar que todos los espacios públicos tienen que ser ocupados libremente por la ciudadanía. Asimismo, dijo que es responsabilidad de todos los sectores políticos atender una demanda mayoritaria como lo es la educación gratuita y de calidad.

Previo a la marcha, los dirigentes de la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech) y de los de secundaria se entrevistaron con diferentes actores políticos y parlamentarios para discutir la ley de presupuesto 2012, que comprende en educación un aumento de 7.2 por ciento (11 mil 650 millones de dólares) y que los jóvenes consideran insuficiente.

Tras una entrevista de los líderes con diputados y senadores opositores, la derecha parecía estar acorralada al trascender que podría haber algunos acuerdos. El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, aceptó la posibilidad de hacer perfeccionamientos impositivos, luego de que en los últimos seis meses de protestas el gobierno se había negado a cualquier cambio en materia fiscal.