Sanciones contra Assad reclaman exiliados a la Corte Penal Internacional
Miércoles 9 de noviembre de 2011, p. 28
Ginebra, 8 de noviembre. La represión en Siria ha provocado la muerte de más de 3 mil 500 personas, indicó hoy en Ginebra la portavoz de la oficina del alto comisionado de la Organización de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH), Ravina Shamdasani.
La funcionaria internacional no precisó cómo contabilizó el número de víctimas fatales, registradas a partir denuncias de fuentes creíbles en el terreno.
Shamdasani reiteró a Naciones Unidas una solicitud para llevar el caso de Siria ante la Corte Penal Internacional (CPI), al tiempo que la oposición siria exhortó a la Liga Árabe para que aplique medidas más severas contra el régimen del presidente sirio, Bashar Assad.
La portavoz de la ACNUDH subrayó en rueda de prensa que la alta comisionada, Navi Pillay, está profundamente preocupada
por los graves informes que ha recibido sobre la represión en la occidental ciudad de Homs.
Más de 60 personas fueron asesinadas por fuerzas militares y de seguridad desde que Siria firmó el plan de pacificación por la Liga de Estados Árabes
, el pasado 2 de noviembre, denunció Shamdasani, y agregó que aunque el gobierno sirio anunció la liberación de 533 presos con ocasión de la fiesta musulmana del sacrificio, miles permanecen detenidos y miles son detenidos arbitrariamente cada día
.
La vocera argumentó que las fuerzas armadas sirias utilizan “tanques y artillería pesada para atacar áreas residenciales de la ciudad de Homs, la cual se ha convertido en el bastión de la oposición política a Assad y por esta razón es blanco de cruentos ataques.
Lamentamos que el gobierno sirio no escuche los llamados internacionales y regionales para poner fin a este derramamiento de sangre
, dijo.
En tanto, el canciller francés, Alain Juppé, señaló que Siria es testigo de una nueva ronda de represión
, mientras el Consejo Nacional Sirio, que reagrupa a la mayoría de las corrientes opositoras, reclamó sanciones contra el gobierno de Assad a la CPI y exigió a la Liga Árabe medidas más severas contra Damasco, en una jornada en que la violencia dejó un saldo de al menos 14 muertos, según la oposición en el exilio.