Mientras el peso resiente una depreciación de 16.2 por ciento durante el segundo semestre de este año, asociada a los retiros de inversionistas extranjeros de los marcados de acciones y bonos del gobierno federal, integrantes de la junta de gobierno del Banco de México advierten que una salida adicional y abrupta de divisas representaría una fuente notable de inestabilidad para el país.

Sólo durante septiembre de este año, los no residentes disminuyeron en cerca de 20 mil 500 millones de dólares la tenencia de acciones de empresas mexicanas que participan en la bolsa local, indicó el banco central.

Otros 3 mil millones de dólares que estaban colocados en bonos de la deuda interna del gobierno federal fueron retirados por inversionistas extranjeros desde el noveno mes de 2011, según estimaciones muy preliminares de los especialistas de la Secretaría de Hacienda.

Con la atención centrada en el comportamiento del tipo de cambio, que al cierre de las operaciones del 4 de noviembre terminó debilitado con una pérdida del peso de más de 50 centavos frente al dólar respecto al nivel de la semana anterior, los analistas de Invex Grupo Financiero consideraron que este movimiento reflejó el nerviosismo de los mercados.

En esa actitud, apuntaron los especialistas de Invex, pesó más el peligro de una moratoria desordenada de Grecia, y un contagio de la crisis bancaria a nivel global, que los datos económicos relativamente positivos que mostraron la débil recuperación de la economía estadunidense.

Pronosticaron que esta semana continuará la volatilidad y la consecuente debilidad de la moneda mexicana.

A su vez, Miguel Messmacher, titular de la Unidad de Planeación Económica de la Hacienda Pública, explicó que la baja en la posesión de valores gubernamentales por extranjeros fue de 40 mil millones de pesos durante el último mes, monto sumamente aproximado y preliminar, del orden de 3 mil millones de dólares.

Estos retiros, frente una disponibilidad de recursos externos de poco más de 200 mil millones de dólares, significan una disminución bastante limitada hasta el momento, desde el punto de vista de cambios en flujos de capital, acotó el funcionario.

En la minuta de la más reciente reunión de los integrantes de la junta de gobierno del Banco de México, se informó que la mayoría de los miembros de este este cuerpo directivo señaló que la volatilidad del entorno externo se tradujo en una importante depreciación del peso frente al dólar y en mayor volatilidad en el mercado cambiario.

En este contexto, dijo un integrante de esta directiva, se redujo la tenencia de valores de corto plazo en poder de extranjeros. Añadió que una salida adicional y abrupta de sus tenencias en valores representaría una fuente de notable inestabilidad.