Denuncian que la iniciativa prepara la privatización de la enseñanza
Investigarán al vicepresidente Angelino Garzón por reunirse con las FARC
Viernes 4 de noviembre de 2011, p. 31
Bogotá, 3 de noviembre. Miles de estudiantes colombianos marcharon este jueves por el centro de Bogotá en rechazo a la nueva ley de educación superior por considerar que se encamina hacia la privatización de la enseñanza, en el contexto de una huelga por tiempo indefinido que llevan a cabo desde hace tres semanas en las 32 universidades públicas del país.
Se estima que unos 15 mil universitarios, sus familiares y activistas de otros sectores salieron a las calles durante esta protesta, en la que exigieron la cancelación del proyecto de ley y cualquier medida que tenga como fin abrirle paso a las trasnacionales –incluyendo el tratado de libre comercio–, además de que criticaron que la ministra de Educación, María Fernanda Campo, haya cancelado un debate público con ellos.
En una audiencia en el Congreso para discutir la reforma a la ley de educación superior, quedó de manifiesto las discrepancias existentes entre los rectores y los estudiantes. El rector de la Universidad Pedagógica Nacional, Juan Carlos Orozco, dijo que sus pares tienen la disposición de acompañar la discusión del proyecto por la vía democrática y pacífica.
Los estudiantes exigen el retiro del proyecto del Legislativo como condición para levantar la huelga y participar en la construcción de un nuevo modelo de educación para el país
. Pero Orozco dijo que si bien la reforma no resuelve los problemas estructurales de la educación superior, le preocupa el retiro de la iniciativa porque quedaría indefinida la ley 30
, como se le conoce.
Líderes estudiantiles dijeron que en un soldado se invierten 18 millones de pesos; en un estudiante apenas poco más de 2 millones
.
En otro plano, la fiscal general de la nación, Vivianne Morales, informó que el vicepresidente colombiano, Angelino Garzón, será investigado preliminarmente
por una supuesta reunión que el funcionario habría sostenido con líderes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en 2002 en el departamento de Valle de Cauca.