La Piedad, Mich., 3 de noviembre. Miles de personas participaron en los funerales del presidente municipal de La Piedad, Ricardo Guzmán Romero, asesinado el miércoles cuando realizaba labores proselitistas en favor de los candidatos del Partido Acción Nacional con miras a las elecciones del 13 de noviembre.

Después de ser velado la madrugada, el cuerpo fue trasladado en cortejo fúnebre por las principales calles de la ciudad hasta llegar al primer cuadro, donde se realizó una sesión solemne de cabildo, que resolvió declarar tres días de duelo en el municipio y ordenó izar la bandera nacional a media asta.

A las 17:15 se inició una misa de cuerpo presente oficiada por el arzobispo de Morelia, Alberto Suárez Inda, en la iglesia de La Piedad. Más de 2 mil 500 feligreses se quedaron en el atrio por falta de espacio. Hubo lágrimas y aplausos para el edil, que inició su gestión en enero de 2008 y la concluiría en diciembre próximo.

Suárez Inda afirmó que es posible revertir la violencia. Podemos construir la paz de manera civilizada, responsable. Mientras más personas vayan a votar estaremos respaldando a nuestras autoridades en el municipio y en el estado, dijo. Los feligreses aplaudieron a Ricardo Guzmán en al menos tres ocasiones durante las casi dos horas que duró la ceremonia.

El secretario de Gobernación, Francisco Blake Mora, y el gobernador Leonel Godoy Rangel montaron guardia de honor a Guzmán Romero. Algunos habitantes reclamaron justicia al Ejecutivo estatal y el pronto esclarecimiento del asesinato. El perredista no respondió.

Antes de que los restos fueran llevados a incinerar, la gente congregada en el atrio gritó vivas y aplaudió.

Por la noche, tres patrullas encabezaron el cortejo fúnebre con sirenas encendidas. Detrás iba la carroza, seguida de cientos de personas, que la acompañaron hasta donde el cuerpo sería incinerado.

Entre los asistentes estuvieron los tres aspirantes a la candidatura presidencial panista, Josefina Vázquez Mota, Ernesto Cordero y Santiago Creel, así como la candidata a la gubernatura Luisa María Calderón Hinojosa, y el presidente del blanquiazul, Gustavo Madero.

Luisa María Calderón llegó al velorio a las 9:30 y se retiró a las 14:30 porque en la tarde cerraría campaña en Pátzcuaro.

El aspirante perredista, Silvano Aureoles, manifestó que se debe investigar a fondo y resolver rápido el crimen para no contaminar la elección. Exhortó a los tres órdenes de gobierno a mejorar la seguridad pública, pues en cinco años han sido asesinados 3 mil funcionarios.

El abanderado priísta, Fausto Vallejo Figueroa, dijo que no se debe echar más leña al fogón, sino que es mejor contribuir a que los comicios se lleven a cabo en paz, porque sólo somos adversarios políticos. Los verdaderos enemigos son la violencia y otros flagelos que mortifican a los michoacanos.