Si el América termina de hundirse este sábado en el clásico ante Cruz Azul es algo que tiene sin cuidado a los jugadores cementeros. No importa que los de Coapa no tengan nada que ganar ni que estén en el penúltimo puesto de la tabla o que ≠insistan en la vergüenza que los embarga.

Nosotros no pensamos en la desgracia ajena, advirtió el delantero Emanuel Villa sobre la situación en la que las Águilas llegan al clásico.

Villa trata con dignidad a un rival serio, pero no miente cuando agradece que a este último compromiso afortunadamente llegan en condiciones distintas a las de los americanistas.

“No vamos sólo por los tres puntos, la clasificación y la posibilidad de estar en la Copa Libertadores. Se juega más que eso en un clásico.

No creo que encontremos un adversario relajado. Es un plantel completo en todas sus líneas. Nosotros sólo podemos pensar que enfrentaremos al mejor América posible, señaló el Tito.

Agotado el respeto deportivo, no elude que este fin de semana será decisivo para La Máquina, porque una derrota sería costosa para las aspiraciones del plantel celeste. Admitió que viven bajo una gran tensión en esta última fecha por el esquema de torneo de esta temporada, en el que sólo clasificarán los mejores ocho clubes de la tabla.

Hay poquitos puntos que separan a los equipos para avanzar a la liguilla. Ojalá entremos de la mejor manera anímica: ganando el clásico, señaló el atacante.

Por su parte, Javier Aquino también fue tajante respecto de las ambiciones de su equipo. Lo que ocurra a otro no le preocupa al joven surgido de las fuerzas básicas cementeras.

Guarda buenos recuerdos por haber estado la tarde en la que La Máquina pudo revertir siete años de no vencer al América. Fueron 16 partidos en los que sufrieron ante los amarillos.

Es bonito estar en la racha positiva pero también me tocó estar en la negativa, cuando decían que nunca podíamos ganar, comentó.

Mientras tanto, el mediocampista Gerardo Torrado se repone de una lesión muscular que lo alejó de las canchas. Apenas la semana pasada entró de cambio en el duelo contra Estudiantes. Espera estar listo para dar el hachazo fulminante a las Águilas este sábado.

Su rehabilitación continúa, pero la confianza que le da su cuerpo, que cada vez le responde mejor, asegura que le brinda tranquilidad. Por eso el ánimo de participar en un duelo crucial.

Creo que en estos partidos las posiciones de la tabla quedan de lado, porque aquí lo que está en juego es el prestigio, concluyó.