Faltan recursos para equipar hopitales y contratar personal, señala
Jueves 27 de octubre de 2011, p. 41
Chilpancingo, Gro., 26 de octubre. La Secretaría de Salud de Guerrero solicitó a la Federación un incremento de mil 500 millones de pesos, adicionales a los 5 mil millones que ejerce este año.
Los recursos extras servirían, entre otras cosas, para echar a andar el hospital Raymundo Abarca Alarcón, que fue terminado en Chilpancingo en febrero de 2010.
Como en tres ocasiones anteriores, se esperaba que el nosocomio fuera inaugurado hoy por el presidente Felipe Calderón, quien sólo visitó Acapulco. La construcción costó 550 millones de pesos y contará con 142 camas, ocho quirófanos y áreas de terapia intensiva, consulta interna, laboratorios y tomografía. Atenderá cada año a 500 mil personas.
La Secretaría de Salud denunció que existe un déficit de más de 3 mil millones de pesos (sin contar recursos del Seguro Popular) que no han sido comprobados desde 2006.
Oficialmente el sector cuenta con 910 centros de salud, pero sólo funcionan 500. La administración pasada reportó que otros 259 estaban terminados, pero los 151 restantes ni siquiera han empezado a construirse. Hay además 12 hospitales generales y cuatro operan como organismos públicos descentralizados.
Un diagnóstico difundido por la dependencia señala que con los recursos extras solicitados se equiparán hospitales y clínicas, se contratará personal y se mejorarán salarios a los trabajadores regularizados, quienes sólo cobran cuotas de recuperación. Entre ellos hay decenas de médicos y enfermeras que perciben apenas 900 pesos quincenales.
La plantilla del sector es de 17 mil 500 trabajadores, de los cuales 2 mil 900 son médicos.
El diagnóstico destaca que en meses recientes en Zihuatanejo y otras ciudades, enfermeras, médicos y especialistas se han negado a trabajar en zonas rurales y otros piden su traslado a las ciudades, principalmente a Acapulco, con el argumento de que sus salarios son bajos.