El mandatario boliviano dice que seguirá esperando
Viernes 21 de octubre de 2011, p. 34
La Paz, 20 de octubre. Los indígenas bolivianos que protestan en rechazo a la construcción de una carretera en la Amazonia dejaron plantado hoy al presidente Evo Morales, quien los había convocado a un diálogo para buscar una salida al conflicto que cumple ya dos meses, tras su arribo a La Paz este miércoles al cabo de una marcha de 65 días y 650 kilómetros de recorrido.
Lamento mucho que los hermanos no se presenten; no sé si realmente tienen una reivindicación o quieren figurar en los medios de comunicación; no sé si quieren dialogar o hacer política
, declaró el mandatario, quien los había citado a las 10:30 de la mañana con una agenda abierta
en las oficinas de la vicepresidencia.
Sin embargo, los líderes de la marcha boicotearon la reunión al presentar una serie de condiciones, entre las que destacan que querían ser recibidos en el palacio presidencial Quemado y no en oficinas de la vicepresidencia, que no querían enviar una comisión de sólo 20 personas, sino que fueran al menos unas 100 y de cara a los medios de comunicación.
Además, se quejaron de que tenían hambre y frío
porque durmieron a la intemperie en la céntrica Plaza de Armas, reprocharon que el presidente no los quiso recibir en la carretera cuando marchaban hacia La Paz, insistieron en que las autoridades los invitaron al diálogo pero el 20 de septiembre los reprimieron, y que ahora sólo se irán después de conversar con el presidente.
Con todo, Evo Morales dijo que seguirá esperando porque es nuestra obligación
y dio una nueva cita en la presidencia para las 18 horas. Al cierre de esta edición no se había concretado el encuentro.