Los Ángeles, 20 de octubre. El médico de Michael Jackson, Conrad Murray, administró al cantante 10 veces más del sedante lorazepam de lo que dijo a la policía y más cantidad de propofol de lo que que declaró, dijo el jueves un experto mundial en anestesiología durante el juicio al facultativo.

Según los niveles de lorazepam en la sangre de Jackson, no puede ser cierto que Conrad Murray le administrara dos dosis de 2 miligramos a lo largo de la noche, afirmó el anestesista Steven Shafer, al testificar en el proceso contra el cardiólogo, acusado de homicidio imprudencial por la muerte del cantante a causa de una sobredosis de fármacos.

Con transparencias proyectadas en la Corte Superior de Los Ángeles, explicó la velocidad en la que el cuerpo metaboliza el lorazepam. Mostró cuánto de ese sedante tendría que haber recibido el artista por vía intravenosa para alcanzar los 0.169 miligramos por mililitro que hallaron los forenses en la sangre.

La única forma en que Jackson pudiera tener tal concentración es con 10 dosis de 4 miligramos cada una, administradas entre la medianoche y las 5 de la madrugada, dijo el especialista, quien tiene un sólido respaldo académico sobre anestesiología y en particular sobre el sedante propofol.

Informe toxicológico

En su declaración a la policía días después de la muerte del Rey del pop, el 25 de junio de 2009, Murray había dicho que administró a Jackson dos dosis de 2 miligramos de lorazepam para ayudarlo a conciliar el sueño.

Si ése fuera el total (de lorazepam) que recibió Michael Jackson, la concentración en la sangre habría sido de 0.025 a 0.03 ml/mg (...) Es lo que el forense habría visto, en lugar de los 0.169 ml/mg que reportó el informe de toxicología.

Esa noche Murray suministró a Jackson, además, dos dosis de 2 miligramos del sedante midazolam, también por vía intravenosa.

Los testigos de la defensa comenzarán a comparecer este viernes.