Villahermosa, Tab., 17 de octubre. Las intensas lluvias mantienen siete ríos fuera de cauce, lo que ha causado daños en más de 320 mil hectáreas de pastizales y cultivos, en perjuicio de 18 mil productores, así como deslaves y cortes en carreteras, principalmente en la zona de los ríos.

El número de damnificados se incrementó de 105 mil a 130 mil en 14 de los 17 municipios, y la cifra podría aumentar debido a que se esperan precipitaciones de entre 50 y 70 milímetros, además del ingreso del frente frío número 7.

En Jonuta, autoridades de Protección Civil, con apoyo de soldados, desalojaron a los mil 800 habitantes de la comunidad indígena de Monte Grande, cuyas viviendas y sembradíos quedaron anegados.

En esta zona, el río Usumacinta, el más caudaloso del país, sigue fuera de cauce y 2.31 metros por arriba de su nivel máximo. Sus aguas causan estragos en Tenosique, Balancán, Centla, Emiliano Zapata y Jonuta.

En esta última población, 43 mil de sus 56 mil habitantes han resultado afectados y las autoridades suspendieron las clases hasta nuevo aviso.

En Balancán, donde se reportan daños en 69 comunidades, el poblado Vicente Guerrero quedó incomunicado por carretera.

En Tenosique, la unidad de Protección Civil informó que unas 400 familias de al menos 19 ejidos fueron trasladadas a cuatro albergues en la cabecera municipal.

La Comisión Nacional del Agua (Conagua) reportó que los ríos Samaria, Pichucalco, La Sierra, Grijalva, Tulijá, Puxcatán y Usumacinta siguen desbordados.

El vocero estatal de la Conagua, Gilberto Segovia, apuntó que el promedio histórico de lluvia para un mes de octubre es de 396 milímetros, pero este año han caído 405.

En Villahermosa, los aguaceros aumentaron dos metros el nivel de dos lagunas y anegaron parte de la colonia Magisterial; sin embargo, el gobernador Andrés Granier Melo aseguró que la capital está fuera de peligro gracias a las obras del Plan Hídrico Integral.

Este lunes el mandatario recorrió zonas afectadas de los municipios de Balancán y Emiliano Zapata para apoyar a los damnificados y evaluar estragos.

Luego de dos días de intensas lluvias generadas por el frente frío número 6, cientos de personas resultaron afectadas en los municipios de Agua Dulce y Nanchital, en el sur de Veracruz, por el desbordamiento de ríos, lagunas y arroyos. En algunas viviendas el agua alcanzó un metro de altura.

Un cerró se desgajó y bloqueó parcialmente la carretera Coatzacoalcos-Tonalá. La Universidad Veracruzana suspendió labores en Acayucan, la Sierra de Soteapan, Minatitlán y Coatzacoalcos.

(Con información de Jesús Lastra, corresponsal)