En riesgo, el pago de pensiones de 37 mil 600 trabajadores en retiro: reporte al Senado
El 60 por ciento de los terrenos está invadido; los bienes muebles, en poder de concesionarias
Preocupan al liquidador 686 juicios laborales de alto riesgo, sin recursos para enfrentarlos
Domingo 16 de octubre de 2011, p. 33
La privatización de Ferrocarriles Nacionales de México, en el sexenio de Ernesto Zedillo, no sólo dejó en manos de empresas extranjeras el servicio de transporte que prestaba la paraestatal, sino que el proceso se hizo con tal descuido que gran parte de su rico patrimonio en bienes muebles e inmuebles no se ha podido recuperar del todo, y los recursos escasean a tal grado que el fideicomiso para el pago de pensiones vitalicias de los ferrocarrileros jubilados se agotará este año.
Ello significa que para 2012 no habrá dinero para cubrir las pensiones de 37 mil 600 trabajadores en retiro, según se desprende del Informe sobre el estado de Ferrocarriles Nacionales de México en Liquidación (FNML), correspondiente al primer semestre de este 2011, que se remitió al Senado.
El Sistema de Administración y Enajenación de Bienes (SAE), el liquidador que sustituyó a Banobras, intenta vender el gran patrimonio de la ex paraestatal, sólo que 60 por ciento de los terrenos está invadido y aunque se tiene un inventario de un millón 459 mil 189 bienes muebles, parte de ellos están en poder de las concesionarias.
Guillermo Tello Ludlow, director liquidador de FNML, da cuenta de la grave situación en el documento que hizo llegar al Senado. En el mismo se precisa que en 1997 se creó el fideicomiso FerronalesJub, para garantizar el pago a los jubilados de la paraestatal.
Sin embargo, al principio de este año sólo contaba con mil 642.2 millones de pesos, insuficientes ya que el FNML también tiene pendientes más de 7 mil juicios laborales de ex ferrocarrileros que demandan pensión jubilatoria o ajuste de la misma.
Detalla que el total de erogaciones de ese Fideicomiso FerronalesJub fue de mil 284.4 millones de pesos, del primero de enero al 30 de junio de este año, ya que incluyó el pago de pensiones, pagos de marcha y gastos de funeral de 135 jubilados fallecidos en ese periodo.
Incluso se tuvo que establecer una Nómina alterna
para el pago de laudos firmes o convenidos con 2 mil 17 ex trabajadores que no han sido incluidos en el fideicomiso.
Preocupan al liquidador 686 juicios de alto riesgo
, donde hay una alta probabilidad de que el tribunal laboral falle en favor de los trabajadores. Tres de ellos representarán una erogación de 3 mil 149.6 millones de pesos.
En total, FNML ha perdido hasta la fecha 444 juicios de alto riesgo y debió cubrir por ello, a mil 237 ex ferrocarrileros, mil 228.3 millones de pesos.
La situación del fideicomiso es tal que en el Presupuesto de Egresos de la Federación de este año se le asignaron 758.3 millones de pesos, de los que hasta junio habían recibido 702.3 millones de pesos, destinados a “cubrir pasivos derivados de juicios laborales, así como para cubrir gastos de operación.
Recurrir a la venta del patrimonio que dejó Ferrocarriles Nacionales no ha sido fácil. En el documento se explica que el inventario de bienes muebles está en una base datos, pero carece de información para dar certeza jurídica sobre la propiedad en favor del organismo.
Aunado a ello, una cantidad importante de bienes registrados no se encontraban ni se encuentran custodiados, ya que al concluir la operación de Ferrocarriles Nacionales, estos no se acopiaron en puntos específicos para ser vigilados
.
De acuerdo con los registros, dichos bienes están dispersos en 749 localidades en 29 entidades federativas y el Distrito Federal.
En el caso de unidades tractivas y de arrastre, se destaca que la falta de control al otorgar las concesiones
provocó “incertidumbre en la posesión y registro de esos activos. Los bienes de telecomunicaciones se arrendaron a algunas de las concesionarias y su devolución al fideicomiso se ha dado de manera documental y no física
.
La superficie de terrenos registrada hasta el primer semestre es de 258.4 millones de metros cuadrados, con un valor de casi dos mil millones de pesos, pero se estima que 60 por ciento de los bienes inmuebles están invadidos, ocupados por familias, con imposibilidad de recuperarlos o con riesgo de generar conflictos sociales, en caso de hacerlo.
También los gobiernos locales han construido vialidades en los terrenos del FNML y hay predios con edificaciones catalogadas como monumentos históricos, lo que disminuye la posibilidad de vender esos bienes.
Las inconsistencias en la información contenida en los anexos de los títulos de concesión y las subdivisiones de polígonos mal ejecutadas han generado discrepancias entre las empresas concesionarias y el FNML, con respecto a las superficies y colindancias de predios contiguos.
El fideicomiso liquidador debió batallar para que la concesionaria Kanzas City Southern de México, SA, regresara a FNML 143 unidades de arrastre, las que serán transferidas al SAE para su comercialización. Se pidió a la empresa extranjera el levantamiento del inventario físico de bienes muebles en Querétaro y San Luis Potosí, donde también se quedó con bienes de la ex paraestatal.