La serie documental El pueblo mexicano, producida por la Universidad Nacional Autónoma de México, es –de acuerdo con la académica Juliana González– uno de los proyectos más ambiciosos e importantes realizados por la televisión cultural. Se trata de un trabajo en verdad excepcional que logra suscitar el asombro ante lo que no se conocía y provocar una nueva mirada sobre lo ya conocido; que saca a la luz nuevos hechos y nuevos significados, de la historia del país, de su dramático presente y de su incierto y angustiante porvenir.

A su vez, el historiador Adolfo Gilly citó al poeta Octavio Paz para sostener que México no es sólo un país hosco y trágico, sino que también es la tierra del colibrí, de los mantos de pluma, de las piñatas y de las máscaras de turquesa. En ese sentido –sostuvo– El pueblo mexicano se propone mostrar ese caudaloso río de vidas humanas en sus creaciones: arquitecturas, músicas, conocimientos, sabores, artes, tejidos, invenciones y modos diversos, todos mezclados, de sufrir, de crear, de gozar los mundos de la vida.

Durante la presentación, se proyectó un demo con aspectos diversos de la serie: la independencia, la construcción de ideología nacionalista mestiza, la cultura, la ciencia y el arte; geografía y demografía; la educación, los retos políticos (sin faltar la referencia al levantamiento del Ejército Zapatista de Liberación Nacional en 1994), el medio ambiente. Profusamente ilustrado, la producción se beneficia del vasto acervo de imágenes de que dispone la filmoteca de la máxima casa de estudios.

Juliana González y Adolfo Gilly forman parte del Consejo Asesor Académico de la serie de 13 capítulos, realizada a iniciativa del rector José Narro y programada para estrenarse el 18 de octubre. Ambos intervinieron ayer en la presentación ante los medios, en el Anfiteatro Simón Bolívar del Antiguo Colegio de San Ildefonso.

El autor de La revolución interrumpida recordó que el pueblo mexicano es resultado del violento cruce entre las culturas caminantes originarias con aquella otra cultura navegante que llegó de oriente: “Si esta marcha milenaria caminante y navegante es cierta, ella sigue andando, aunque no lo sepamos, por dentro de las mexicanas y los mexicanos y aparece en ingenio, en modito, en violencia y ternura y en inteligencia.

“Mucho sufrimiento, mucha astucia y un torrente de poesía –esa armonía del mundo en palabras– y de utopía –esa armonía del mundo en ideas– atraviesa la historia de esta tierra y de sus creaciones.”

Eso es –puntualizó Gilly– lo que la serie quiere mostrar.

Juliana González expuso que El pueblo mexicano es una producción original y significativa en la que se ve a México en movimiento, en su singular e intenso devenir, en sus tres grandes y contrastadas etapas: la indígena, la colonial y la moderna; y se le ve, a la vez, en la extraordinaria diversidad de su realidad natural y cultural; en la rica complejidad de sus expresiones y también de sus fallas y frustraciones; de sus obstáculos externos e internos; y se ve al pueblo mexicano en su dramático presente asomándose casi siempre a un incierto y angustiante porvenir. La serie conlleva no sólo una mirada esperanzada, sino una mirada crítica que no elude ver los riesgos, peligros, amenazas, los males que parecerían insuperables.

El historiador Alfredo López Austin, quien colaboró en uno de los programas, se refirió –en entrevista por separado– a la necesidad de darnos cuenta de quiénes somos en momentos tan difíciles como los que atravesamos, en los que quienes dirigen al país lo hacen desde el desconocimiento y la ignorancia de nuestras necesidades”.

La presentación de la serie estuvo a cargo de Ernesto Velázquez Briseño, director general de Tv UNAM, quien subrayó que ésta ha sido la producción audiovisual más importante de la televisión cultural en México, inclusive con repercusión iberoamericana, y celebró que 27 televisoras públicas del país vayan a emitirla a partir del próximo martes.

Rosalba Casas, directora del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM –una de las instancias que llevaron a cabo el proyecto, junto con la Coordinación de Difusión Cultural–, señaló que una de las virtudes de El pueblo mexicano es la diversidad de temas que aborda.

El astrónomo Manuel Peimbert Sierra, investigador emérito de la UNAM y miembro del Consejo Asesor Académico de la serie, señaló que ésta pretende mostrar aspectos de nuestra historia que nos definen y buscar enseñanzas de lo que hemos hecho bien para tener elementos para un futuro mejor, tarea en la cual la universidad juega un rol de mucha importancia.

El proyecto, dijo, se basa en investigaciones y datos duros, no es autocomplaciente.

Se mencionan cuáles son los problemas que tenemos y las guías de posibles soluciones, entre ellas la educación y el sentido de solidaridad.

La historiadora y escritora Elisa Vargaslugo, integrante del consejo asesor, manifestó su esperanza de que motive a la gente a reflexionar sobre cómo es nuestro país, por qué es así y cómo podemos mejorarlo y triunfar dentro de él.

La rúbrica es El comalito, canción escrita ex profeso e interpretada por Lila Downs.