Creado por iniciativa de Luis Donaldo Colosio como un órgano legislativo partidista, hoy se instalará el cuarto Consejo Político Nacional (CPN) en la historia del PRI, con la principal misión de decidir los métodos para la selección de candidato presidencial y de aspirantes al Congreso en 2012.

Dentro del PRI nadie duda de la preminencia de consejeros proclives a las aspiraciones presidenciales de Enrique Peña Nieto, ex gobernador del estado de México, sobre todo por el peso de los mandatarios del tricolor para decidir los nombres de quienes representarán a sus entidades por las diversas estructuras partidistas.

Los dos abiertos aspirantes a la candidatura presidencial: Manlio Fabio Beltrones y Peña Nieto, son consejeros nacionales. El primero, por el Senado, y al segundo lo acreditó la Confederación Nacional de Organizaciones Populares.

En un acto programado para no dudar más de tres horas, el PRI tratará hoy de mostrar músculo y espíritu de cuerpo, si bien el cambio de Carlos Jiménez Macías, originalmente propuesto para ocupar la secretaría técnica, por Enrique Jackson Ramírez, y la rebeldía manifiesta del ex candidato presidencial Francisco Labastida, al oponerse a avalar el método de consulta abierta, son vistos por observadores de este organismo político como gestos superficiales de un proceso donde coexisten profundas diferencias.

De acuerdo con Pedro Joaquín Coldwell, presidente de la Comisión Nacional de Procesos Internos, este día, el único estado sin consejeros será Michoacán, porque está en medio de un proceso electoral, y en estos casos el PRI acostumbra diferir la selección de sus representantes hasta que el proceso comicial transcurra.

La renovación y primera sesión de este nuevo CPN representa la salida del PRI hacia las elecciones del próximo año.

Otras decisiones a adoptar hoy por el consejo se refieren a facultar al presidente nacional del partido para iniciar conversaciones con otras fuerzas con las cuales eventualmente pueda ir en coalición el próximo año, fijar el tope de gasto de las precampañas tanto a la Presidencia como a los puestos legislativos y nombrar las comisiones política permanente y de fiscalización.

Aunque Joaquín Coldwell ha insistido en que éste no es un consejo manipulable y se compone con los mejores cuadros del PRI, cada cual con sus preferencias y convicciones, admite una característica de la cultura de su partido: el liderazgo de los gobernadores y su influencia para decidir quiénes irán al consejo.

Por reglamento, son miembros del CPN el presidente y el secretario general del PRI, los ex presidentes del mismo y los dirigentes de los comités estatales, un presidente de comité municipal y un alcalde por cada entidad, la tercera parte de los senadores y de los diputados del tricolor, dos diputados locales por cada estado, los gobernadores priístas, 10 de la Fundación Colosio y el mismo número del Instituto de Capacitación y Desarrollo Político.

Asimismo, tres integrantes de los grupos militantes con discapacidad y otros tres de los de adultos mayores. A cada uno de los sectores agrario, campesino, popular, juvenil y de mujeres corresponden 50 consejeros, cinco a la Asociación Nacional de la Unidad Revolucionaria, cinco más de la Asociación Leandro Valle y tres a cada una de las organizaciones adherentes con registro nacional.

La reunión del consejo empezará con un discurso del dirigente nacional, Humberto Moreira, el cual se prevé ponga acento en el tema de la unidad partidista.

Ello –explica Joaquín Coldwell–, porque el PRI está convencido de que las derrotas recientes se debieron a las rupturas internas, y el camino para recuperar la Presidencia de la República y tener mayoría en las cámaras es la unidad.