Colonia/Guadalajara, 5 de octubre. La Agencia Mundial Antidopaje (AMA) está afligida por la contaminación alimentaria que hay en México, por lo que espera garantías del máximo nivel gubernamental, para que el tema no sea un problema durante los Juegos Panamericanos que comienzan la semana próxima en Guadalajara.

Estamos muy preocupados, dijo Olivier Niggli, director de asuntos legales de la AMA, a la agencia Dpa sobre el tema, y su nivel de alerta es tan grande, que el director general, el neozelandés David Howman volará de inmediato a México para reunirse con el director general de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), Bernardo de la Garza, y con el presidente Felipe Calderón.

Dicen que tienen un sistema que funciona, pero queremos conocerlo, añadió Niggli, quien admitió que si la visita termina con malas noticias, el asunto ya no tendrá solución para los Juegos Panamericanos, porque no habría tiempo para nada. (entonces) Habría que sugerir a los deportistas que coman pescado y no carne de res, agregó sonriente.

En meses recientes autoridades mexicanas cerraron varios rastros por la presencia de clembuterol en las reses. Se trata de una sustancia dañina para la salud y que puede significar sanciones por dopaje si llega a encontrarse en los atletas.

Izan lábaro patrio en Guadalajara

En la sede de la justa continental, bajo las notas musicales del mariachi y motivados por la competencia, los cerca de 200 deportistas mexicanos que asistieron se mostraron contentos por ser parte de la ceremonia de izamiento de bandera en la Villa Panamericana.

Así, el lábaro patrio fue el primero en ondear en suelo tapatío para dar paso a la realización de la llamada Fiesta de América, en la cual a partir del próximo 14 de octubre los deportistas nacionales buscarán escribir una historia diferente.

Por su parte, De la Garza externó su entusiasmo por tener en México la justa continental, al reiterar que pueden lograrse más de 23 medallas doradas y en total de más de 80 preseas.

Excesiva presencia policiaca

La presencia de la Policía Federal en la zona metropolitana de Guadalajara ha causado más problemas que beneficios, de acuerdo con quejas ciudadanas y oficiales.

En la Cámara de Diputados, el legislador priista por Jalisco, Salvador Caro Cabrera, planteó que el Legislativo federal pida a la Secretaría de Gobernación poner orden y exigir el apego a la legalidad a los cuerpos federales que llegaron a la capital tapatía.

En tanto, el gobernador Emilio González Márquez consideró excesivo el despliegue de esta policía que, con las municipales y estatal, sumarán 11 mil efectivos.

El mandatario estatal criticó el despliegue exhibido hasta ahora, al comentar durante el izamiento de la bandera mexicana: Agradecemos el apoyo, pero creemos que debe ser un poco más moderado, y agregó que no le gusta ver tanto Policía federal en la calle porque en Jalisco no estamos acostumbrados.

Hace tres semanas llegó el primer contingente policiaco, conformado por mil 500 agentes, quienes se han visto involucrados en diferentes hechos, como en el choque del pasado martes entre una patrulla contra un camión de transporte público, que dejó dos policías federales y un civil, sin identificar, lesionados, mientras que continúan los graves embotellamientos vehiculares por los retenes móviles que instalan, sobre todo en Periférico o bien en la ruta que seguirán las caravanas de deportistas durante la justa continental.

Con información de Juan Carlos G. Partida, corresponsal